carta a la directora del chuo

Doña Eloína Núñez Masid:
Me dirijo a usted para hacerle saber lo que está ocurriendo en el servicio de urgencias del CHOU, aunque eso es algo de lo que usted debe tener conocimiento pleno.

El sábado, día 21 de julio del año en curso, llamé a una ambulancia para poder trasladar a una persona mayor a urgencias, debido a una dolencia en rodilla derecha, que no le dejaba ni apoyar el pie con el dolor. El caso es que a las 11,47 horas la ambulancia nos dejó en el servicio de urgencias (después de ser bien informados por teléfono de lo que podría ser, en este caso una trombosis que gracias a Dios no resultó ser), y mi familiar fue atendido a las 16,55 horas, sin que previamente le hubiesen visto la tensión, hecho análisis sanguíneo y demás requisitos que deben efectuar los sanitarios nada más entrar en dicho servicio hospitalario, saliendo de la Residencia a las 18,30 horas.

Considerando que hubo unas urgencias bastante importantes, entiendo que el resto tengan que retrasarse, pero no de esta manera, ya que había urgencias, como en mi caso, que ya llevaban esperando desde mucho antes que llegasen las más urgentes, y que podrían estar ya más que atendidas. Pero claro, con un solo médico para todo el mundo eso es más que imposible, por lo que quiero mostrarle mi rechazo al sistema que tienen en el CHUO, debido a que no es culpa de los enfermos que el Gobierno esté haciendo tantos recortes, y eso es algo a lo que considero usted debe poner (o por lo menos intentar poner) solución y no seguir de brazos cruzados. No puede ser que sólo haya un médico en urgencias y que no aparezcan más médicos para sustituirle en caso de necesidad, porque está claro que es mejor intentar no ponerse enfermo antes que ir a que a uno le acudan médicamente, porque nos morimos antes de ser atendidos, y eso que ustedes, los médicos, están para salvar vidas y no para quitarlas! No pretendo ofenderla con este comentario pero sí es cierto que a fin de cuentas es lo que está pasando, desafortunadamente.

Y no quiero despedirme sin comentarle que el personal que estaba trabajando en ese turno ha sido bastante desagradable y falto de respeto a la hora de informar y recibir a los familiares que allí estábamos esperando noticias de los enfermos.

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