Impotencia es lo que siento. Pero ¡basta ya! de lamentarnos o quejarnos en silencio. Hoy quiero exigir que asuman responsabilidades quien corresponda. No sé si al Sergas, o al director de Morea, pero los familiares de personas con esquizofrenia demandamos que el centro de rehabilitación para personas con enfermedad mental de Verín ¡funcione! Lleva abierto ocho años y, a día de hoy, sólo hay una trabajadora social en el Centro.
¿Cómo puede este centro funcionar si no hay los profesionales más necesarios como son un psicólogo y un terapeuta ocupacional? Pasaron dos psicólogas, Lorena y Elena, altamente cualificadas, y que... dieron vida al centro, y trabajaron activamente con los usuarios y familiares en pro de la integración social de las personas con esquizofrenia, desarrollando diferentes programas de rehabilitación que estos enfermos requieren para su recuperación: rehabilitación cognitiva, rehabilitación psicomotriz, psicoeducación, clases de tenis, hipoterapia, habilidades sociales, etcétera. Pero ¿qué ha pasado con ellas?, ¿por qué han estado cada una de ellas un año, y después sin más no han continuado su nece saria labor con nuestros hijos enfermos? Nadie desde la Asociación nos informa, nadie nos pregunta qué pensamos sobre su no renovación de contratos. ¿A quién pedir responsabilidades?, estoy cansada como socio y familiar que no se nos escuche a las familias, y que nadie haga nada. Sí, ¡vale! hay un centro, ¿pero de qué sirve si no hay profesionales que trajen con nuestros enfermos? Abandono, dejadez, olvido,... esta es la situación en la que se encuentra Morea Verín. Y como familiar no estoy dispuesta a caller o a dejar que siga pasando el tiempo sin quedarme de brazos cruzados como hacen ellos, mientras nuestros enfermos ven pasar lo días sin que nadie trabaje para mejorar su calidad de vida y manejar el deterioro que la enfermedad produce en quien la sufre.
