demasiados DECIBELIOS EN LAS FIESTAS

Sirvan estas letras para hacer frente común a un problema que muchos ciudadanos llevamos padeciendo desde hace mucho tiempo y que en pleno año 2012 gran parte consideramos tercer mundista.
El problema no es otro sino el del ruido que durante tres, cuatro, cinco y este año seis días, padecemos muchos vecinos de A Ponte por culpa del elevadísimo sonido que prácticamente todas las atracciones, desde una máquina de azúcar hasta un hinchable, pasando por los clásicos coches de choque, tómbolas-bingo, etcétera, consideran indispensable para atraer a su clientela, y sin que nada ni nadie límite sus decibelios desde las seis de la tarde hasta las cuatro de la madrugada, límite que cualquier negocio de hostelería, de esta y de todas las ciudades de este país, tiene que mantener a rajatabla si no quiere enfrentarse a una importante sanción económica, e incluso al cierre de su negocio.

Pues nada, los 'empresarios' de estas festivas atracciones que están durante seis días en nuestro barrio tienen carta blanca para 'reventar' con sus altavoces los cristales de cualquier inmueble-negocio que está ubicado en sus inmediaciones. Y no se le ocurra a usted hablar con la comisión de fiestas -autoridad competente- para que intente mediar en la situación, pierde el tiempo miserablemente, y probablemente acabe todavía más irritado, si cabe.

Te puede interesar
Más en Cartas al director