DESAHUCIOS Y gente sin hogar

Lo comentaba recientemente en el grupo de Stop Desahucios de A Coruña: que el enfoque que se debe dar a este tipo de problemática ha de partir de tres frentes bien definidos y que de un modo u otro están relacionados y nos reclaman: los desahucios por alquiler, los desahucios por hipotecas y los desahuciados crónicos (los sin techo), pues las tres vertientes tienen un denominador común que se podría llamar fomento del alquiler social, y todo ello confluyente en el objetivo 2015 de la UE sobre vivienda digna para que nadie padezca exclusión residencial y nadie viva en la calle o en albergues.
Mientras ello ocurre, y por lamentable que parezca, cada día se descubren nuevos casos de corrupción, a costa de nuevos desheredados que de forma masiva acuden a los comedores sociales de las ONG o sufren desamparo.

Escuchamos sus dramas, o mejor dicho los encontramos de frente, y torcemos la mirada o cambiamos de acera. Y nos quedamos tan tranquilos. Esto sucede en una sociedad en la que tanto se habla del desarrollo y tecnología. Me parece aberrante que se sigan originando nuevas bolsas de pobreza por esa maquinaria político/bancaria/judicial/policial que lo arrasa todo de la mano de una legislación que atenta contra nuestros derechos (el millón y medio de firmas para la ILP que debatirá el Parlamento deberían ser suficientes). Por ello creo que esta crisis debería hacernos apreciar a todos en profundidad los valores de la solidaridad.

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