'¡Contra la justicia y la impunidad, Ni perdón ni olvido!' (Bertol Brecht).
La noticia no me ha pillado desprevenido. Es más, la esperaba desde que el Congreso de la Nación en Chile se opusiera por una gran mayoría a la proposición de Sebastián Piñera, como presidente de la República, y líder de la derecha chilena, de resucitar la Ley del Empalme que, en la práctica, daba carpetazo a cualquier intento de procesar a los autores de las flagrantes violaciones de los derechos humanos (torturas, muertes, etc.) acaecidas durante la dictadura de Pinochet.
Pues, bien, el magistrado Manuel Vasquez, de la Corte de Apelaciones de Santiago de Chile, ha dictado auto de procesamiento a ocho exmilitares por un presunto delito de asesinato cometido en la persona del cantautor Víctor Jara. El abobinable crimen tuvo lugar en un sótano del Estadio Nacional de la capital andina en la fecha del 16 de septiembre de 1973, tres días después de su detención en la Escuela de Arte y Oficios, en donde impartía clases. La autopsia reveló que su cuerpo presentaba signos de extrema tortura. Sus manos habían sido machacadas a golpe de culatazos de fusil, y todo su cuerpo presentaba 44 impactos de bala. La auténtica Ley de Punto Final debería ser aquella que no deje sin castigo a cualquier criminal.
Desde esta mi afligida patria veo en el cono sur americano amplios horizontes de grandeza. Mientras escucho a Victor Jara: 'Yo no canto por cantar/ni por tener buena voz/canto porque la guitarra/tiene sentido y razón' .
Pues, bien, el magistrado Manuel Vasquez, de la Corte de Apelaciones de Santiago de Chile, ha dictado auto de procesamiento a ocho exmilitares por un presunto delito de asesinato cometido en la persona del cantautor Víctor Jara. El abobinable crimen tuvo lugar en un sótano del Estadio Nacional de la capital andina en la fecha del 16 de septiembre de 1973, tres días después de su detención en la Escuela de Arte y Oficios, en donde impartía clases. La autopsia reveló que su cuerpo presentaba signos de extrema tortura. Sus manos habían sido machacadas a golpe de culatazos de fusil, y todo su cuerpo presentaba 44 impactos de bala. La auténtica Ley de Punto Final debería ser aquella que no deje sin castigo a cualquier criminal.
Desde esta mi afligida patria veo en el cono sur americano amplios horizontes de grandeza. Mientras escucho a Victor Jara: 'Yo no canto por cantar/ni por tener buena voz/canto porque la guitarra/tiene sentido y razón' .
