Hasta siempre, amigo

En una primavera singular donde el tiempo juega con el dado de la incertidumbre, en este mayo tormentoso donde la vida se resiste a brotar. En este mes de triste recuerdo, he vuelto a sentir como el destino arrebata a uno de mis mejores amigos, a un gran hombre: Antonio Rodríguez González, “Rodriguete” ciudadano ejemplar, maestro de ética y compromiso, amigo del amigo, solidario y comprometido.
¡Cuántas veces he acudido a ti en busca de consejo! , ¡Cuantas veces me he refugiado en tu comprensión! ¡Cuanto he aprendido de ti! Has sido fuerte en el dolor, firme en las convicciones, honesto en la vida. Has amado a los tuyos, has comprendido la debilidad de los demás, has luchado por la igualdad, por la justicia, por la humanidad…Has gozado de la amistad de los que te conocían, has compartido con tus camaradas la desesperanza de la lucha, te has sacrificado por todos sin pensar en ti y has sido refugio del que te necesitaba. ¡Siempre estabas ahí!
Que vacío, que solos nos dejas, que desesperanza, que desasosiego… Nunca podremos olvidar tu gallardía, tu buen hacer, esos infinitos méritos que hicieron el milagro de que en las primeras elecciones municipales de la democracia el PCE, alcanzase en la villa de Xinzo un triunfo histórico. Ese triunfo era tuyo, era el reconocimiento de un pueblo a tu trabajo, a tu entrega generosa como bibliotecario, como profesor, como sabio y amigo.
Decía José Martí “Libertad es el derecho que toda persona tiene a ser honrada, a pensar y hablar sin hipocresía” , tu lo has alcanzado has sido libre, has sido honrado, has pensado y siempre has hablado sin hipocresía.
Hasta siempre “Rodríguete”.

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