una visión más realista sobre la marihuana

Las leyes holandesas que hasta ahora nos parecían a muchos un acierto y un camino a seguir en la lucha contra el narcotráfico y la normalización de la marihuana, si no lo han hecho ya, están a punto de cambiar, habida cuenta de las pretensiones ultraderechistas de sus gobernantes actuales. Después de esto será muy difícil que los no holandeses se puedan beneficiar de la venta de marihuana para consumo propio en los denominados coffee shops, como pasa con el tabaco, el alcohol o el café en una infinidad de países, que se venden en tiendas y son legales.
Más nos valdría estudiar el cannabis de una manera desprejuiciada para tratar de afrontar una realidad que como la mayoría no tiene encuentra nuestras mojigaterías, a pesar de que muchos les moleste, se lleva utilizando antes de la creación de sus dioses y mesías. Para que nos hagamos una idea, dicha planta es más antigua que el antiguo testamento, como también lo es su uso y consumo.

Las leyes actuales que ilegalizan a la marihuana son unos vetustos mecanismos de control supeditados a unos intereses más bien escondidos en las sombras. Hoy día poca gente se traga los hipócritas argumentos que demonizan a la marihuana y al mismo tiempo no se refieren nunca al alcohol, tan encumbrado en nuestro país. El uso de la marihuana es tan normal y habitual como lo es el uso del vino y que además se puede consumir y no tener ningún problema como el que disfruta del vino con una mesura adecuada. La legalización traería la posibilidad de un mayor control, los precios serían más razonables, la calidad del producto tendría unas garantías y, lo que creo más importante, sería el mayor golpe dado contra el narcotráfico de marihuana y sus derivados en este país.

Me despido con esta reflexión: 'Por supuesto que papá estaba a favor de la legalización (de la marihuana). No estaba loco, ¡no quería a sus hijos en la cárcel! (Michael, hijo adoptivo de Ronald Reagan).

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