La actuación ordenada por el anterior alcalde ha sido remodelada para adaptarla a la normativa

El Concello de Gomesende regresa a Sobrado tras pasar dos años en A Casanova por obras

La renovada casa consistorial del Concello de Gomesende. (Foto: Marcos Atrio )
La actividad municipal de Gomesende regresará a Sobrado tras dos años de estancia provisional en el edificio de A Casanova, después de que el grupo de gobierno haya solucionado los problemas legales de la obra ejecutada por el anterior alcalde.
Los trabajadores y funcionarios del Concello de Gomesende pasan los últimos días en las instalaciones del edificio multiusos de A Casanova, que en los últimos dos años ha sido la sede provisional de las oficinas municipales. ‘Cuando llegamos a la alcaldía, nos encontramos que las obras que el anterior alcalde había mandado ejecutar en el edificio consistorial de Sobrado, carecían de proyecto alguno’, relata el concejal de Urbanismo, Oscar Pereira Soto, quien matiza que ‘después de hacer las correspondientes comprobaciones, optamos por quedarnos en el edificio multiusos hasta legalizar la situación’.

Los trabajos realizados en 2007 por el entonces alcalde popular, Radigundo Castro, con sistieron en la modificación de la distribución de la planta baja y la construcción de una planta alta de 90 metros cuadrados donde, además de nuevas oficinas, se habilitó un gran balcón. ‘Hemos hecho un nuevo proyecto visado de la planta baja adaptándola a la normativa vigente en materia de accesibilidad’, relata Oscar Pereira, quien confiesa que ‘negociamos con el constructor y el Concello sólo ha tenido que hacer frente a los 7.000 euros que ha costado el proyecto visado’.

Sobre la primera planta, que no se adapta a la legalidad (no dispone de ascensor) y que carece de cualquier proyecto que lo avale, desde el Concello confirman que ‘colocaremos una puerta y quedará cerrada al público, así que la usaremos como archivo’, matiza Pereira, quien confía en estrenar las instalaciones ‘antes del verano’.

Una obra considerada ‘menor’

La necesidad de renovar las instalaciones municipales construidas a finales de la década de los 80, así como ampliar las dependencias municipales motivaron al anterior alcalde, Radigundo Castro Fernández, a realizar una mejora de la casa consistorial. ‘Se trataba de una obra menor, una mejora del proyecto original para lo que se mandó elaborar una memoria que cuenta con la firma de una arquitecta y que fue respaldada por el pleno’, defiende el hoy portavoz de la oposición, quien subraya que ‘para ello el arquitecto realizó una mejora sobre el proyecto inicial, una reforma que incluye un altillo para archivo y para la oficina del alcalde que no va hacer que se caiga el edificio’. Castro sí reconoce que ‘hubo un error por parte del secretario, que recogió en el acta de aquel pleno que se aprobaba un proyecto cuando en realidad era una memoria’.

Ejecutada la reforma por el grupo de gobierno que preside Pura Rodríguez Álvarez, las nuevas dependencias de Sobrado dispondrán, además del despacho de alcaldía y el salón de plenos, nuevas oficinas para el secretario, los funcionarios y una sala de uso polivalente con ordenadores. Mientras, el edificio multiusos de A Casanova recuperará su función inicial para cursos y actividades culturales, ‘aunque compartirá instalaciones con las asistentas sociales que se trasladarán allí desde el centro de salud’, matiza Pereira.



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