Los trabajos de humanización de la iglesia de San Pedro en Leirado han permitido sustituir el asfalto por materiales tradicionales que realzan el patrimonio
Los vecinos de Leirado, en el concello de Quintela de Leirado, disfrutan ya de la renovación y humanización del entorno de la iglesia parroquial de la localidad, de principios del siglo XVIII, en una área pública.
Un presupuesto de 357.000 euros ha permitido, durante los últimos meses, transformar una zona de frío asfalto en un gran espacio en el que convivir conductores y peatones, y donde se realza el patrimonio a través de la introducción de mejoras bioclimáticas, materiales tradicionales y de aprovechamiento de los recursos hídricos a través de medidas como la reconducción de las aguas o la canalización para el futuro soterramiento de las líneas, tanto eléctricas como telefónicas.
La obra “deunos moito choio, pero a obra quedou moi ben”, reconocía esta semana el alcalde del municipio, el veterano José Antonio Pérez Cortés, quien incidía en que los trabajos aún no han acabado. Están pendientes de la ornamentación con flores y plantas, que se realizará en cuanto mejore la climatología y se pueda completar la canalización: “A obra está, quedou a tubaxe feita, agora temos que loitar coas empresas eléctricas e de telefonía para que soterren todo o cableado. Por lei, están obrigadas a facelo”, enfatizaba Pérez Cortés.
Cooperación
La actuación, fruto de la colaboración entre el Concello, Diputación de Ourense y la Consellería de Medio Ambiente, quien asumió el 70% del presupuesto, ha permitido reformar todo el espacio, con la reforma del pavimento, la humanización con jardineras y bancos del muro perimetral de la iglesia, la canalización del agua y crear unas escaleras por la zona del Calvario que, en un futuro, permitirán conectar con la casa consistorial.
Los planes del grupo de gobierno pasan por seguir mejorando la zona y así se contempló en la redacción del proyecto inicial, quedando para una segunda fase completar la remodelación del camino que comunica la iglesia parroquial con la capilla de los Remedios, “e o acondicionamento de todo o entorno da casa do concello, coa posibilidade de trasladar a estrutura de patinaxe ás piscinas”, explicaba el alcalde.
