Una exposición producida por el Museo de Bellas Artes de Bilbao analiza la imagen ambivalente, como encarnación de lo bueno y lo malo, de la mujer a finales de la Edad Media y que se reflejaba en el arte y la literatura de la época.
La muestra, titulada 'Hay más en ti. Imágenes de la mujer en la Edad Media (siglos XIII-XV)', recoge 48 obras de arte y piezas de uso común y cotidiano de las mujeres acomodadas de la época, prestadas para la ocasión por importante museos públicos y privados de Europa. La comisaria ha sido la doctora suiza en Arte Corinne Charles.
El título elegido, 'Hay algo más en ti', refleja, según ha explicado hoy Corinne Charles en su presentación a los medios, su intención de 'ir más allá de la visión comúnmente aceptada e inmutable que de la mujer se tenía en dicha época'.
Charles ha advertido que, para comprender esa visión de la mujer como modelo e ideal de virtud (plasmado en la figura de la Virgen María) y de lo más pecaminoso (reflejado en la figura de Eva), hay que tener en cuenta 'que la producción iconográfica en la Edad Media está dominada por el hombre y, sobre todo, por los religiosos'.
'La misoginia era muy importante y estaba muy extendida en la época, especialmente en el ámbito religioso', como lo reflejan las esculturas, retablos y textos clericales que ilustran la muestra y en las que se ve a la mujer tanto como modelo ideal de madre y mujer como encarnación del Pecado Original.
El director del Museo de Bellas Artes de Bilbao, Javier Viar, ha advertido de que la exposición que se abre mañana al público, que podrá verla hasta el próximo 15 de mayo, no es una muestra al uso de las organizadas en esta pinacoteca, ya que hay muy poca obra colgada de las paredes.
Esto se debe, ha explicado, a que la mayoría de los elementos mostrados son objetos de uso cotidiano, íntimo y privado de mujeres acomodadas, como bolsos de tela, bandejas, arcas, cofres, manuscritos o utensilios de belleza, ricamente decorados, que se exhiben en vitrinas encastradas.
La muestra exhibe también objetos curiosos o difícilmente clasificables como artísticos como son un cinturón de castidad del siglo XIX o una insignia erótica en la que se representa a una vulva femenina coronada, sacada en procesión por varios hombres.
La exposición se ha dividido en seis grandes apartados que tratan de abarcar todos aquellos aspectos relacionados con la imagen de la mujer que se tenía a finales de la Edad Media como su papel en el matrimonio, el modelo de belleza femenina, su papel como imaginario erótico y fuente de placer, su relación con el trabajo y, por último, con el poder y el Derecho.
