Los últimos siete días pasó de todo en la “casa verde”. Comenzó en el último partido con la lesión del portero Diego García que se rompió el tendón de Aquiles y no volverá hasta la próxima temporada. Después, el accidentado viaje de vuelta en el que se pasaron media noche en una explanada en Zaragoza porque se estropeó el autocar antes de pasar por Madrid para coger un tren. Tras dos días de descanso, volvieron el miércoles a los entrenamientos sin saber ni en que sitio ni en que campo iban a jugar, ya que no lo conocieron hasta pasada las tres de la tarde cuando ya había acabado el entreno. El jueves llegó y entrenó por primera vez el nuevo guardameta Pablo Picón y, esta mañana, madrugón de los importantes para a las ocho y media coger un vuelo en Vigo rumbo a Barcelona, de ahí a Gavá, que es dónde se juega el partido. A las doce comida y, a las cuatro, a jugar. Por cierto, primera vez que el equipo viaja en avión esta temporada.
El equipo está preparado y van con la única idea de traerse los tres puntos para poder seguir haciendo historia. Llegan con 45 puntos y sin ninguna presión, todo lo contrario que los locales que se juegan la vida. Salvo Adrián Cruz, que apura su vuelta (podría darse en un par de semanas) y los porteros Diego García y Manu Figueroa, también lesionados, el resto han viajado todos, incluido Pablo Picón, que aún no tiene la ficha en regla, pero se espera que llegue para el partido. También vuelve Vitra, que sigue con sus problemas en las costillas, pero que ya está muy recuperado.
En la UE Cornellá, su técnico Gonzalo Riutort habló en la previa y afirmó que “para nosotros jugar en Gavá es hacerlo un poco más cerca de nuestra gente, el campo está en buenas condiciones y vamos a centrarnos en lo que pasa dentro del campo que es dónde tenemos incidencia”. Sobre el Arenteiro dijo que “están haciendo una gran campaña y eso no es por casualidad, vienen con mucha confianza y sabemos que hacen muchas cosas bien. Tienen un juego muy vertical, activan muy bien los laterales por fuera, te generan superioridad por dentro donde tienen jugadores con mucha movilidad, pero nosotros tenemos todos los sentidos puestos en este partido, tenemos que jugar al límite”.
“Es un partido en campo neutral”
Javi Rey, pasado el enfado de no conocer dónde jugaba hasta el miércoles, señaló que esta situación “es algo raro en una liga tan profesional, pero no vamos a darle más importancia. Es un campo pequeño y muy estrecho que creo que es el principal hándicap, pero estamos preparados y seguro que nos vamos a adaptar. Prácticamente es un partido en campo neutral porque ellos nunca jugaron en él”.
