ANÁLISIS

Un deporte libre de sospechas

Cuando se acerca el final de liga, brotan las noticias sobre compra de partidos o primas sospechosas

Llega el mes de mayo y con él las competiciones llegan a su recta final. Emoción, sufrimiento, alegrías y tristezas. Pero también mal olor. No falla. Cada temporada, a estas alturas, brotan las noticias que no desearíamos leer. Rumores, con más o menos fundamento, que apuntan al intento de compra de partidos, a primas de dudosa procedencia y todavía más dudosa finalidad, o a la nueva trama de apuestas que hace unos meses hizo temblar los cimientos del fútbol más modesto.

El tema está ahí y hacia el final de las ligas cobra especial relevancia. Mal asunto. La repetición de estas noticias temporada tras temporada puede hacer que el aficionado pierda la fe en el deporte. Totalmente profesional o con un perfil más amateur. Afecta a todo. Porque la competición debe premiar a los mejores sobre el césped o la pista. Sin más aditivos. Esa es la esencia de un deporte que debe huir de las sospechas. 

Federativos, directivos, jugadores... todos deben poner de su parte para cortar de raíz estas malas noticias. Incluso los rumores. El final de liga no debe convertirse en una "vale todo". Que triunfe aquel que lo merezca de verdad.

Te puede interesar