El entrenador del Arenteiro estaba feliz al final del partido afirmando que “ha sido el partido y la noche soñada. Pasa a formar parte de la historia del Arenteiro, del fútbol provincial e incluso me atrevería a decir que del fútbol gallego. A veces el fútbol y la vida tiene este tipo de circunstancias que a lo mejor cuando parece que no estas teniendo tu mejor año, que no salen las cosas de cara, el destino te tiene preparado cosas como estas y además creo que es muy merecido por el trabajo que este grupo lleva haciendo desde el 26 de julio”.
Reconoció que “el vestuario ahora mismo está exaltado. Les habíamos trasmitido que tenían la oportunidad de hacer historia y también quiero agradecer al club el esfuerzo que ha hecho al permitirnos concentrarnos e incluso sentimos que estamos en deuda con la directiva y la afición ya que sólo le brindamos la victoria en dos partidos, por eso el vestuario está liberado ya que si haces cosas, trabajas y te evades del ruido, las cosas acaban saliendo”. Y terminó reconociendo sin tapujos que “creo que aún no somos conscientes de lo que acabamos de conseguir. Para mí fue un día histórico ya que estar dirigiendo un partido de Copa del Rey me parecía una locura. Ahora que hemos conseguido pasar y nos va venir un equipo del fútbol profesional y tengamos más perspectiva lo podremos valorar, pero seguro que muy orgulloso de poder entrar en la historia del Arenteiro”. Y terminó: “Es un refuerzo mental y anímico para el grupo ya que en la liga somos ambiciosos y nos cuesta entender que esto es parte de un proceso para mejorar. Cada golpe que llevamos nos sirve para el futuro y para seguir creyendo. A partir de este partido habrá más gente que creerá, pero lo difícil era hacerlo como lo hizo esta directiva y estos jugadores y los tengo que felicitar y ponerlo en valor”. Y finalizó esperando que en el sorteo de mañana les sonría la suerte.
