Sporting Carballiño se quedó con una victoria que no le resultó para nada fácil ante un Loñoá que jugó más de una hora con un jugador menos, llegando incluso el cuadro visitante a empatar el partido marcando su primer gol en esta liga.
El cuadro local casi sorprende en el arranque del encuentro al romper Robin el fuera de juego tras recibir un balón bombeado que terminó anticipándose el portero alejando el peligro.
Supo reaccionar el conjunto visitante con un tremendo disparo de Roberto que salvó la mano de Gorka junto al palo derecho y hasta una acción posterior que terminó en gol, sería anulado a instancias del asistente por falta al cancerbero carballiñés.
De esta última oportunidad se produciría una situación que marcaría, por entonces, el rumbo del partido. Meji se plantó cerca de la frontal del área, pero el meta Álvaro frustró el tiro del mediocampista despejando con su mano fuera del área, lo que produjo su inmediata expulsión.
El Loñoá, que no contaba con un portero suplente, tuvo que improvisar y colocó a Choco bajo los tres palos. Para colmo de males, la falta ejecutada por Camba dejó inmóvil al prematuro meta para colocar el balón junto al palo derecho y de esa manera abrir el marcador (1-0).
A pesar de ponerse todo en su contra, el cuadro de Marcos Sierra rearmó sus líneas y le plantó caro, al punto de contar con una nueva posibilidad para empatar. Gran asistencia de Peque para Borja cuyo potente remate fue bloqueado por Gorka.
El entrenador del Loñoá efectuó tras el descanso dos cambios que le aportaron más dinamismo en ataque y a un Roberto en plan organizador del juego. El aviso lo dio Martín yéndose por su banda, pero su centro atrás no fue rematando con mucha precisión por Peque. De todas maneras, el gol rondaba los dominios de Gorka y este llegó después de 415 minutos de temporada. Roberto metió un buen cambio de orientación hacia Óscar Bravo que filtrándose en el área definió por bajo superando por completo al meta sportinguista y de esa manera lograr el 1-1.
RESPUESTA INMEDIATA
Cuando todo parecía ir encaminado, un mal despeje de Choco lo acabó aprovechando Martín Pérez que resolvió la papeleta con la portería desierta y así volver a poner por delante a los suyos con el 2-1.
Aún quedaba mucho hilo en el carrete y el Loñoá no bajó en ningún momento la guardia en procura de un resultado positivo y donde cada intervención de Óscar Bravo ponía en jaque a una línea defensiva que se mostraba muy aplomada.
El Sporting Carballiño era otro de mitad de campo hacia adelante, donde la labor de Canexón daba alas a sus delanteros. Champi, uno de ellos, probó fortuna desde fuera del área, pero Choco alcanzó a despejar sobre el larguero.
Los minutos se consumían y los intentos visitantes no terminaban de cuajar y eso ponía más de los nervios a sus aficionados que no paraban de animar al Loñoá.
Al final, ni empate, ni victoria para el Loñoá y aunque siga metido en el pozo de la tabla, tiene mimbres para salir de tan abajo. El primer problema será buscar un portero.
