Marta Míguez: "La carrera es grande por todos los atletas populares que asisten, por el poder de convocatoria que tiene"
Marta Míguez pasa las horas previas a la popular do San Martiño con las preocupaciones típicas de toda organización, "si colocar o no grada, los vallajes, tanto los tipos como los metros, el personal en cada zona del trazado, las de avituallamiento, la cantidad de los productos y su distribución, los trofeos... En fin, lo que se viene a llamar la logística".
Más de diez mil inscritos, 10.012 en concreto a la una y media de la tarde del miércoles 9. ¿Se superarán los del año pasado? "Yo estoy convencida que sí, en la última edición se disparó en los dos últimos días de plazo. Podemos conseguirlo", añade Míguez.
"¿Las sensaciones? Principalmente que nos queda mucho trabajo por hacer, mucho que ajustar. Pero estoy tranquila porque tengo un buen equipo, que responde mucho mejor bajo presión", detalla Míguez.
Un trazado de diez mil metros, homologado, espera el domingo 20 a los participantes en la carrera absoluta; uno de 4,700, no homologado, a los que disputarán la competición escolar.
"Para sentirnos muy orgullosos"
Pero por encima de kilómetros y registros particulares está el carácter popular de la carrera, ése que le ha hecho grande con el paso de las ediciones. "Me atrevería a decir que los atletas llamémosle anónimos son mucho más importantes que los que ganan cualquier edición de la prueba o los que marcan el récord de la carrera. El ambiente que se respira en cada edición es algo muy destacable. La San Martiño es grande, cada vez más grande, por todos los atletas populares que asisten, por el poder de convocatoria que tiene", reflexiona la ourensana. "Claro, quién nos iba a decir que 40 años después esta carrera popular iba a ser lo que ahora es. Es algo para sentirnos muy orgullosos todos", finaliza Marta Míguez.
Hassan Lekhili en la competición masculina y Solange Pereira en la femenina son los campeones en ejercicio. Poco más de media hora, 30,52 minutos, necesitó él en la edición de 2015; 34,48 precisó ella, lejos en todo caso de los 28,49 que marcó Daniel Kiplagat y de los 32,45 fijados por Marisa Barros en la carrera del 2014.
9.484 de los casi 12.000 inscritos completaron hace ahora un año el trazado de diez kilómetros, homologado por la Federación española de atletismo en el 2005, un 8 por ciento de crecimiento respecto a 2014.
