El Ourense mostró su cara menos amable en el último partido de la Liga regular en O Couto. El conjunto ourensanista, un tanto mermado por las lesiones y que se encontró con dos mazazos psicológicos (uno antes del partido, con la ausencia del preparador físico David Carnero por la muerte de un familiar, y otro en el descanso, con el mareo del central Adrián Padrón en el vestuario que le llevó directamente a un centro hospitalario, presumiblemente por un problema estomacal), sólo tuvo buenas sensaciones en la primera media hora, en la que fue superior a su rival, pero que después de ese arreón inicial se dejó ir ante un equipo que se jugaba entrar en la promoción y que a falta de bien juego sí puso más ganas.
Lo único salvable en los locales fue la primera mitad del joven Kike, que desbordó siempre a su par. La pena es que sus centros no encontraron rematador.
Precisamente Kike dispuso de la mejor opción para el Ourense a los tres minutos. Josu centró desde el fondo y el canterano, después de controlar con el pecho, estrelló el remate desde el área pequeña en el cuerpo del portero José Ángel. A los 15 minutos el Ourense tuvo la segunda gran ocasión de marcar. Kike se coló por el fondo hasta el área y su centro al segundo palo fue rematado alto por Yebra. La última gran opción local fue un remate desde la frontal de Yebra que despejó el meta visitante.
Ahí, a los 30 minutos, se terminó todo el bagaje creativo de un Ourense que fue a menos. Cándido Gómez, obligado por las circunstancias, varió el dibujo pero no dio resultado. El Racing Vilalbés logró sacudirse el dominio y terminó por creérselo. Ganó terreno y además de no pasar apuros en defensa logró crear opciones en ataque. En el 70 Vicente remató en el área pequeña y el balón se marchó por fuera. Dos minutos después Lucas Sierra atajó el remate de Adrián. A la tercera, en el minuto 86, llegó la vencida. Andrés cabeceó al fondo de la red local una falta lateral. 0-1 y delirio visitante.
Precisamente Kike dispuso de la mejor opción para el Ourense a los tres minutos. Josu centró desde el fondo y el canterano, después de controlar con el pecho, estrelló el remate desde el área pequeña en el cuerpo del portero José Ángel. A los 15 minutos el Ourense tuvo la segunda gran ocasión de marcar. Kike se coló por el fondo hasta el área y su centro al segundo palo fue rematado alto por Yebra. La última gran opción local fue un remate desde la frontal de Yebra que despejó el meta visitante.
Ahí, a los 30 minutos, se terminó todo el bagaje creativo de un Ourense que fue a menos. Cándido Gómez, obligado por las circunstancias, varió el dibujo pero no dio resultado. El Racing Vilalbés logró sacudirse el dominio y terminó por creérselo. Ganó terreno y además de no pasar apuros en defensa logró crear opciones en ataque. En el 70 Vicente remató en el área pequeña y el balón se marchó por fuera. Dos minutos después Lucas Sierra atajó el remate de Adrián. A la tercera, en el minuto 86, llegó la vencida. Andrés cabeceó al fondo de la red local una falta lateral. 0-1 y delirio visitante.
