A tres minutos para acabar la prórroga y cuando todo hacía presagiar que se llegaría a los penaltis para conocer la resolución de la final por el ascenso, el Pabellón rompió la igualdad sin goles. Hugo recogió un rechace dentro del área para darle la victoria a los ourensanos a pesar del desesperado intento del joven portero Aimar. De esta manera, el equipo de Luis Parada retorna a Primera 22 años después. Fue una final muy igualada, de escaso fútbol y con ambas defensas muy serias.