El Santa Teresita no podía fallar ante el Cartelle y, al final, tuvo que aceptar con cierta resignación un empate a dos tantos que deja pendiendo de hilo su permanencia de producirse algún arrastre de un representante ourensano de la Preferente Galicia.
Su primera aproximación fue un cabezazo de Brais que se marchó por centímetros sobre el travesaño y, desde ese momento, jamás encontró la manera de sorprender a un Cartelle intenso en su juego y con mayor convicción a la hora de generar peligro.
A pesar de las dimensiones del campo, Dani Chimpín se erigió en el organizador bien respaldado por Omar y Richi. Por delante, los continuos desmarques de Japter y Sergi, aunque este último caía en la trampa del fuera de juego bien ejecutada por el “Santa”. Y, siempre al acecho, el “pichichi” Grego, que puso a prueba los reflejos de Abel.
Superada la media hora del primer tiempo, el gol visitante comenzaba a madurarse, después de un disparo alto de Grego, otro posterior de Sergi y otro más a cargo de Omar, que frenó el portero local.
Pero el 0-1 se consumó a diez minutos de llegar al descanso. Grego recibió un perfecto pase filtrado por parte de Dani Chimpín que dejó solo al atacante del Cartelle para resolver con un buen disparo cruzado, colocando el balón junto a la base del palo derecho. Era el 0-1 y estaba más que merecido. De esta manera, el exjugador del Santa Teresita abría una herida en el ánimo del equipo de Joel Docampo.
La diferencia en el marcador se pudo estirar en las botas de Sergi, que, tras quedar mano a mano con Abel, acabó rematando forzado y algo desviado.
La segunda aproximación de los locales fue un tiro de Brais que detuvo con gran seguridad Iván.
La actitud del “Santa” debía cambiar para intentar enderezar el rumbo y, de esa manera sacar algo positivo. Jacobo lo intentó con un remate lejano y luego sería Oli con un cabezazo.
El Cartelle dosificaba esfuerzos, pero quería ser el protagonista y cerca estuvo de marcar a través de un disparo de Yago.
Resucitó en dos minutos
Los minutos se consumían jugando en contra de los intereses locales y, cuando la desesperación parecía obnubilar sus ideas, se produjo un pequeño milagro. Dar vuelta el marcador en apenas 60 segundos.
Denis, uno de los jugadores con más presencia en la creación, gestionó con gran inteligencia el empate. Cogió un balón a unos 15 metros de la portería y sorprendió con su remate de zurda la estirada del meta Iván para colocar el 1-1.
El momentáneo empate ya era un gran premio, pero el Santa Teresita quería y debía ganar para alejarse de los puestos de arrastre. En medio de uno de los pocos desajustes defensivos del Cartelle, nació el 2-1. Oli, volcado sobre la derecha de su ataque. Preparó su bota y sacudió las redes con un tremendo disparo. Nada pudo hacer el portero por impedirlo.
En un final tenso, el Cartelle fue a por la igualdad y acabó fastidiándole la victoria a su rival en una jugada a balón parado que remató de cabeza Toni, sellando el empate a dos.
De todas maneras, el Santa Teresita aún gozó de una nueva posibilidad para llevarse el partido. El juvenil Rubén casi sorprende a Iván con una buena rosca que dio en la parte superior del larguero y con el cancerbero visitante superado. Empate amargo y futuro incierto.
