Teresa Carreño, de 10 años, es la única representante provincial en un Campeonato de España que cita a 1.000 participantes
Castrelo de Miño es sede, desde hoy hasta el domingo, del Campeonato de España de remo olímpico para las categorías alevín, infantil y veteranos. Cerca de 1.000 deportistas de 79 clubes y de todas las comunidades y entre todos ellos una canija con 10 años recién cumplidos, más ilusión que nadie y pasión incontrolable por el deporte. Sobre todo por el remo. “También hago windsurf, monto a caballo, patino… pero el remo me encanta”. Gabriel Fernández (su entrenador y Director Técnico del Club Náutico Castrelo de Miño) me ayuda siempre y yo me esfuerzo mucho para hacerlo cada día mejor”. Al lado, su madre (se llama Rosa María, pero ella misma se llama Coti) presume de una hija a la que no se le agota nunca la batería a costa de tener que recorrer Ourense entero para cumplir con los entrenamientos de cada deporte.
Este fin de semana Teresa Carreño Álvarez lleva ella sola la bandera del remo ourensano. No hay nadie más. Y lo hace en una categoría que no es la suya: “Tendría que competir con las benjamines, pero como no puede ser, pues me meten con las mayores”. Y las mayores son las alevines.
Hace un año, en la Coupe de la Jeunesse, Teresa hizo de pontonera para los “bólidos” de este deporte: “Te tumbas y con las manos agarras el bote hasta que ellos salen disparados”. Y ahí empezó todo. 11 meses después estará compitiendo en un Campeonato de España.
Su prueba es el 1x, que técnicamente se llama skiff. Algo más de dos minutos remando para completar 500 metros. La protagonista lo explica perfecto: “Yo diría que lo más importante es tener técnica y no pasarte tampoco de rápido. Si sales súper rápido luego llegas al final muy cansado y te acaban adelantado. Es una mezcla de saber salir bien, tener técnica y, no ir tampoco tan tranquilo, pero no ir súper rápido”. Y eso hará: “Gabriel me dice que ya remo bastante bien. Intentaré clasificarme, pero si no lo consigo tendré otra opción el sábado tempranito en la repesca. Y si ahí no paso, pues ya adiós”.
Sea cual sea el resultado ella seguirá entrenando y de paso intentando convencer algún compi de Salesianos para que se sume a este deporte: “Por ahora no lo he conseguido, pero es un deporte muy chulo”. Y lo vende mejor que nadie: “Aquí te van a ayudar mucho, vas a pasarlo muy bien en todas las pruebas ganes o pierdas y al acabar de competir lo vamos a pasar genial juntos”.
Hoy está sola, pero con niñas con la ilusión de Teresa, el remo seguro que seguirá captando aficionados en Ourense.
Del resto de la competición, destacar la presencia de Clara Fernández en la misma prueba que Teresa, pero en la competición de veteranos. Es de A Cañiza, pero también compite con el Club Náutico Castrelo de Miño.
