La mala suerte parece perseguir al joven centrocampista Antonio Álvarez, 'Toni'. El jugador que la pasada temporada estuvo alejado más de seis meses de los terrenos de juego por una rotura del cruzado posterior vuelve a vivir la cara negativa del fútbol. Esta vez, cuando volvía a recordar al espigado jugador que destacó sobremanera en el Pabellón de la División de honor juvenil, de nuevo una lesión se cruza en su camino.
Era el minuto 28 del partido que enfrentaba en Abelleira a Melias y Ourense B, Toni fue en busca de una pelota y...
'Corría hacia mi portería y cuando intenté proteger un balón me giré y ya vi que no podía girar, noté un chasquido y muchísimo dolor'.
Enseguida se dio cuenta que la lesión era de gravedad, en la tarde del lunes se lo confirmaron. 'Me revisaron y me sacaron seis tubos de sangre... Aunque el doctor quiere ver la lesión a través de una resonancia ya me anticipó que cuando hay sangre suele haber rotura del cruzado o que incluso puede haber algo más'.
Ahora mismo lo que desea el futbolista, que entrena con la primera plantilla del CD Ourense y juega en el filial, es 'que me puedan hacer la resonancia lo más rápido posible para saber lo que tengo y ponerle solución cuanto antes, aunque sé que suelen ir despacio. Ahora mismo me ha bajado un poco el hinchazón y ya me duele algo menos', subraya, aunque eso sí camina acompañado de unas muletas.
Estaba muy a gusto
Si la temporada pasada no fue nada buena para Toni, en la actual estaba volviendo a recobrar el lado positivo del fútbol. 'Después de un año muy duro ahora estaba encontrándome a gusto, cada semana mejor y las sensaciones eran similares a mi último año en división de honor de juveniles, pero ahora se ha ido todo al garete, se ha acabado la temporada'.
Sin embargo, sí se muestra contento por lo realizado hasta el momento, tanto a nivel individual como colectivo. 'Es para estar orgullosos, somos un equipo recién ascendido y compuesto por jugadores muy jóvenes que si nos dicen a principio de temporada que a estas alturas íbamos a estar a dos puntos del segundo clasificado seguro que muchos habrían dicho que era imposible'.
¿Eso significa que hay una buena hornada de jugadores?. 'Por supuesto, sería una auténtica pena no aprovechar a muchos de los chavales que están en este momento jugando en el Ourense B. No es porque sean mis compañeros, pero estoy seguro que hay cuatro o cinco jugadores que con paciencia tienen sitio en la primera plantilla, sólo hay que darles la oportunidad. El mejor ejemplo lo tenemos en Rubén Arce, que no tiene nada que envidiarle al resto'.
Apuesta en firme
Es la eterna cantinela, jugadores que en su época juvenil se enfrentan a rivales que con el paso del tiempo juegan en equipos de superior categoría mientras los ourensanos no acaban de salir. Toni tiene claro el motivo: 'En general se apuesta muy poco por la cantera, aquí salen futbolistas como en otros sitios, sólo hay que hacer una apuesta en firme, no ponerlos un partido y olvidarse de ellos', finaliza.
'Corría hacia mi portería y cuando intenté proteger un balón me giré y ya vi que no podía girar, noté un chasquido y muchísimo dolor'.
Enseguida se dio cuenta que la lesión era de gravedad, en la tarde del lunes se lo confirmaron. 'Me revisaron y me sacaron seis tubos de sangre... Aunque el doctor quiere ver la lesión a través de una resonancia ya me anticipó que cuando hay sangre suele haber rotura del cruzado o que incluso puede haber algo más'.
Ahora mismo lo que desea el futbolista, que entrena con la primera plantilla del CD Ourense y juega en el filial, es 'que me puedan hacer la resonancia lo más rápido posible para saber lo que tengo y ponerle solución cuanto antes, aunque sé que suelen ir despacio. Ahora mismo me ha bajado un poco el hinchazón y ya me duele algo menos', subraya, aunque eso sí camina acompañado de unas muletas.
Estaba muy a gusto
Si la temporada pasada no fue nada buena para Toni, en la actual estaba volviendo a recobrar el lado positivo del fútbol. 'Después de un año muy duro ahora estaba encontrándome a gusto, cada semana mejor y las sensaciones eran similares a mi último año en división de honor de juveniles, pero ahora se ha ido todo al garete, se ha acabado la temporada'.
Sin embargo, sí se muestra contento por lo realizado hasta el momento, tanto a nivel individual como colectivo. 'Es para estar orgullosos, somos un equipo recién ascendido y compuesto por jugadores muy jóvenes que si nos dicen a principio de temporada que a estas alturas íbamos a estar a dos puntos del segundo clasificado seguro que muchos habrían dicho que era imposible'.
¿Eso significa que hay una buena hornada de jugadores?. 'Por supuesto, sería una auténtica pena no aprovechar a muchos de los chavales que están en este momento jugando en el Ourense B. No es porque sean mis compañeros, pero estoy seguro que hay cuatro o cinco jugadores que con paciencia tienen sitio en la primera plantilla, sólo hay que darles la oportunidad. El mejor ejemplo lo tenemos en Rubén Arce, que no tiene nada que envidiarle al resto'.
Apuesta en firme
Es la eterna cantinela, jugadores que en su época juvenil se enfrentan a rivales que con el paso del tiempo juegan en equipos de superior categoría mientras los ourensanos no acaban de salir. Toni tiene claro el motivo: 'En general se apuesta muy poco por la cantera, aquí salen futbolistas como en otros sitios, sólo hay que hacer una apuesta en firme, no ponerlos un partido y olvidarse de ellos', finaliza.
