Las ourensanas cayeron ante el Badajoz en un encuentro en el que solamente estuvieron por delante en el primer minuto
El peor final para una pésima temporada en casi todos los aspectos. El Pabellón Ourense se despidió ayer de la Liga Femenina 2 tras sufrir una nueva derrota, esta vez ante el Badajoz.
En una cancha de Os Remedios triste, el partido no pasará a la historia como el del adiós soñado. Sin apenas intensidad en los momentos iniciales, el Badajoz pronto se puso por delante. Marcando la pauta pero sin llegar a tener una renta que le diese confianza, el buen hacer de Sara García y Noelia Oliva en estos compases iniciales evitó un mal mayor (14-19).
En una continuación de los primeros diez minutos y ya con Regina Gómez en el campo, las extremeñas ampliaron la ventaja por encima de los 10 puntos, momento en el que el Pabellón reaccionó con un parcial de 8-0 y acortó distancias dejando el marcador al descanso en 29-36.
En una situación ya habitual, el Pabellón salió tremendamente despistado y sin alegría de los vestuarios. Aprovechando la situación, Puchetti y Gómez ampliaron su cuenta particular, llegando de esta forma a bordear las ventajas de 20 puntos, algo que evitó Nerea Nieto con un triple en la fase final de este periodo (34-50).
Como si de un pinchazo de garra se tratase, esa canasta fue un pequeño revulsivo para las ourensanas en el inicio del último acto. Encadenando buenas defensas y tremendamente acertadas en ataque, el Pabellón enlazó un parcial de 12-0, que las situó con cuatro puntos de desventaja con medio cuarto por jugar (46-50).
Sin embargo, la contestación visitante no tardaría en llegar y un 0-10 en contra con Patricia Zurita anotando contra viento y marea, terminó por arruinar las escasas esperanzas de un equipo histórico que se despide de la que fue su casa durante más de diez campañas. Para el recuerdo quedará la última canasta del equipo en la Liga Femenina 2, un triple de Nieto que puso el definitivo 55-69 en el electrónico de Os Remedios.
Ahora, tiempo de reflexión y balances. El Pabellón tiene por delante varios meses para encontrar una solución y disipar las nubes que se ciernen sobre el futuro del equipo.
