TERCERA DIVISIÓN

Al Verín se le va otro punto en el tiempo añadido

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photo_camera El verinense Anderson Cruz, autor del gol local, trata de llegar a una pelota ante un jugador del Negreira.

El Negreira, gracias al gol de Cristian en el minuto 93, se lleva los tres puntos del Arjiz, cuando ya no lo contaba

El Verín, que finalmente disputó su encuentro ante el Negreira en el José Arjiz, que aguantó bastante bien pese a la lluvia caída, vio como al igual que había sucedido ante el Ribadumia, en esta ocasión el Negreira se llevó la victoria en el tiempo de descuento.

El partido estuvo marcado por el estado del terreno de juego, que provocaba que el intento de jugar el balón tuviera que quedar para mejor ocasión. Ese juego, beneficiaba al Verín en teoría, que salió muy enchufado al partido y en el que dejó el dominio al equipo visitante. Aunque la primera ocasión clara fue para los locales, pero el disparo de Javi Ramos, que llevaba marchamo de gol, pegó en un defensor. La réplica visitante llegó por medio de Rodri, pero en una inmejorable situación, mandó la pelota por encima de la meta de Diego García. La primera parte finalizó con un disparo de Kata que se fue desviado y con otro del local Samuel Rúa que atajó Pajarillo.

Quintairos fiel a su cita

En la segunda parte, el técnico visitante Pose puso sobre el campo al ourensano Adrián Quintairos. Y cuando llevaba poco más de diez minutos sobre el campo, fue fiel a su cita con el gol. El Negreira botó un saque de esquina que remató Ángelo al larguero y Quintairos fue el más listo para recoger el rechace y mandarlo al fondo de la red.

El Verín se enrabietó y se fue arriba. Aunque antes, una galopada de nuevo del ourensano le dejó solo ante Diego, pero su vaselina se marchó fuera. Pudo ser el 0-2 y la sentencia, pero en la jugada siguiente, Anderson Cruz hizo el 1-1 al anticiparse a su marcador y de cabeza superar a Pajarillo.

El encuentro entró en una fase de locura y cualquiera de los dos pudo marcar, sin embargo, cuando ambos daban por bueno el empate, llegó el mazazo en el 93. Una pelota sin mayor peligro la recogió Cristian al borde del área y sacó un disparo que sorprendió a todos para hacer el segundo y definitivo, que sentó como un jarro de agua fría.

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