El Barcelona homenajeó a Tito Vilanova con una victoria por 1-3 en Valladolid en un partido en el que tuvo el control del juego y en el que no le hizo falta imponer su mayor ritmo ante un conjunto pucelano que aguantó el 0-0 casi todo el primer periodo gracias a su orden y consistencia defensiva.
El Valladolid esperaba al Barcelona en media cancha, pero subía su presión cuando atisbaba la oportunidad de robarle el balón a la zona de creación azulgrana. Enfrente, los catalanes, sin forzar, fueron poco a poco encajonando en su campo a los locales. Un centro de Alves al que no llegó Alexis fue la primera ocasión, a los cinco minutos.
Los minutos pasaban y nada cambiaba. El Barcelona asfixiaba al Valladolid en la salida de presión y encontraba a un Messi bullicioso que sacó una falta que él mismo ejecutó a las manos de Dani Hernández a los nueve minutos de juego.
Entretanto, el Valladolid se esforzaba en atajar el caudal ofensivo visitante para labrar transiciones no muy numerosas pero capaces de inquietarle al Barcelona. Manucho lo consiguió con un remate de cabeza que golpeó en el cuerpo de Alba a centro de Balenziaga.
El ritmo parsimonioso y las dos recias líneas de cuatro que Djukic erigió en el centro del campo provocaron que el Barcelona no hallase la profundidad que demandaba.
El Barcelona tocaba y tocaba y en el minuto 35 una falta al borde del área la estrelló Messi en el palo.
El Valladolid era incapaz de dar dos pases seguidos pero exhibía una notable solidez defensiva que impedía a los azulgrana hilar fluidez en las inmediaciones del área. Sin embargo, una vertiginosa triangulación entre Xavi, Messi y Jordi Alba acabó con un centro raso desde la izquierda de este último que Xavi Hernández remató a placer en el segundo palo. Era el minuto 42.
Tras el descanso, más de lo mismo. El balón seguía siendo del Barcelona. Cerca estuvo el 0-2, pero ni Alves ni Pedro acertaron.
El Valladolid estiró las líneas y alejó la pelota de su área, aunque pasó a asumir más riesgos. Messi falló un balón claro que disparó con la derecha dentro del área al cruzarlo en exceso.
Se redimió del fallo acto seguido. Recibió en el pico del área, se dio la vuelta, engatilló y colocó el balón en la parte interior del palo.
El Valladolid no tiró la toalla. Pasó a acaparar más el balón y a atreverse a hacer más cosas en campo contrario. Hasta que Javi Guerra encontró un balón suelto en el área pequeña.
El gol encendió Zorrilla y los pucelanos se volcaron a por la igualada, pero una pérdida en el centro del campo dejó a Tello solo contra Dani Hernández. El canterano no falló en el último suspiro y cerró el partido. Victoria con dedicatoria, para Tito Vilanova.
Xavi Hernández aseguró que se habían tomado el partido con la intención de hacer 'un último esfuerzo' para dedicarle el triunfo a su entrenador, Tito Vilanova.
'Ya está en casa, algo que es una gran noticia. Era importante dedicarle la victoria a Tito. Necesitábamos la victoria para seguir líderes y mantener esta racha y hemos hecho un gran esfuerzo para conseguirla', remarcó.
Añadió que podían haber 'sentenciado antes', aunque aclaró que el Barcelona había hecho 'un partido muy completo'.
PALABRA DE ROURA
Asimismo, el segundo entrenador del Barcelona, Jordi Roura, aseguró que 'la única forma' que tenía el equipo de intentar ayudar y hacer sentir bien a Vilanova era ganando, y remarcó que habían tenido una actitud 'encomiable'.
En este sentido, Vilanova abandonó ya el hospital del Vall d'Hebrón, donde el jueves fue operado de un tumor. Pasará las fiestas con su familia.
Los minutos pasaban y nada cambiaba. El Barcelona asfixiaba al Valladolid en la salida de presión y encontraba a un Messi bullicioso que sacó una falta que él mismo ejecutó a las manos de Dani Hernández a los nueve minutos de juego.
Entretanto, el Valladolid se esforzaba en atajar el caudal ofensivo visitante para labrar transiciones no muy numerosas pero capaces de inquietarle al Barcelona. Manucho lo consiguió con un remate de cabeza que golpeó en el cuerpo de Alba a centro de Balenziaga.
El ritmo parsimonioso y las dos recias líneas de cuatro que Djukic erigió en el centro del campo provocaron que el Barcelona no hallase la profundidad que demandaba.
El Barcelona tocaba y tocaba y en el minuto 35 una falta al borde del área la estrelló Messi en el palo.
El Valladolid era incapaz de dar dos pases seguidos pero exhibía una notable solidez defensiva que impedía a los azulgrana hilar fluidez en las inmediaciones del área. Sin embargo, una vertiginosa triangulación entre Xavi, Messi y Jordi Alba acabó con un centro raso desde la izquierda de este último que Xavi Hernández remató a placer en el segundo palo. Era el minuto 42.
Tras el descanso, más de lo mismo. El balón seguía siendo del Barcelona. Cerca estuvo el 0-2, pero ni Alves ni Pedro acertaron.
El Valladolid estiró las líneas y alejó la pelota de su área, aunque pasó a asumir más riesgos. Messi falló un balón claro que disparó con la derecha dentro del área al cruzarlo en exceso.
Se redimió del fallo acto seguido. Recibió en el pico del área, se dio la vuelta, engatilló y colocó el balón en la parte interior del palo.
El Valladolid no tiró la toalla. Pasó a acaparar más el balón y a atreverse a hacer más cosas en campo contrario. Hasta que Javi Guerra encontró un balón suelto en el área pequeña.
El gol encendió Zorrilla y los pucelanos se volcaron a por la igualada, pero una pérdida en el centro del campo dejó a Tello solo contra Dani Hernández. El canterano no falló en el último suspiro y cerró el partido. Victoria con dedicatoria, para Tito Vilanova.
Xavi Hernández aseguró que se habían tomado el partido con la intención de hacer 'un último esfuerzo' para dedicarle el triunfo a su entrenador, Tito Vilanova.
'Ya está en casa, algo que es una gran noticia. Era importante dedicarle la victoria a Tito. Necesitábamos la victoria para seguir líderes y mantener esta racha y hemos hecho un gran esfuerzo para conseguirla', remarcó.
Añadió que podían haber 'sentenciado antes', aunque aclaró que el Barcelona había hecho 'un partido muy completo'.
PALABRA DE ROURA
Asimismo, el segundo entrenador del Barcelona, Jordi Roura, aseguró que 'la única forma' que tenía el equipo de intentar ayudar y hacer sentir bien a Vilanova era ganando, y remarcó que habían tenido una actitud 'encomiable'.
En este sentido, Vilanova abandonó ya el hospital del Vall d'Hebrón, donde el jueves fue operado de un tumor. Pasará las fiestas con su familia.
