España, con la generación de futbolistas más brillante de su historia, disputa la tercera final en cuatro años de éxito, en la Eurocopa 2012, ante la Italia de la resurrección, último peldaño antes de convertirse en leyenda si consigue firmar la triple corona en Kiev.
España-Italia es la final justa. La campeona ha sabido competir. Ha realizado una Eurocopa perfecta con la base en la defensa. Un solo gol encajado es el impulso para el triunfo. En su camino estuvo minutos en el alambre, ante Croacia, por enarbolar la bandera del juego limpio. Un empate 2-2 dejaba fuera a Italia. Cosas del destino, su rival en la final de Kiev. Francia y Portugal han sido las víctimas en los cruces previos.
El favoritismo, la presión de ser el rival a batir, es un papel nuevo para España. Los rivales han cambiado su identidad cuando se han enfrentado a los españoles. Vicente Del Bosque lo ha tenido claro desde el principio. No ha dudado. Diez titulares indiscutibles y la figura del delantero centro rotatoria en función del rival.
Antes de la final sólo tiene dos dudas por despejar, mantener a Silva, del que preocupa su bajón físico, y elegir la referencia ofensiva.
El canario ha ido perdiendo brillantez según se ha ido agotando. En la semifinal ya sólo jugó una hora. Si es suplente entrará un extremo, Jesús Navas o Pedro Rodríguez, los dos han respondido a la perfección como revulsivos.
Arriba es Cesc el favorito. Siempre aparece ante Italia. Le marcó el penalti final en cuartos de la Eurocopa 2008 y el primer gol de esta competición. Aquel día ante defensa de cinco, un factor que fue decisivo para Del Bosque. El seleccionador espera noticias del rival. El resto del equipo titular lo sabe el país de memoria.
La ambición de una España que busca su tercera Eurocopa chocará con el 'estilo Prandelli', que busca un título para coronar el cambio. Es la nueva Italia, la tetracampeona alejada del conservadurismo y el 'catenaccio'.
Casi nadie esperaba que Italia alcanzara la final. Pero si algo tiene la azzurra es que sabe como lidiar con todo tipo de asuntos extradeportivos. Se han recuperado los lesionados y están todos preparados. De medio campo hacia delante está todo claro, Pirlo, Montolivo, Marchisio, De Rossi, Balotelli y Cassano, los más creativos.
KIEV, 20,45. TELE5.
El favoritismo, la presión de ser el rival a batir, es un papel nuevo para España. Los rivales han cambiado su identidad cuando se han enfrentado a los españoles. Vicente Del Bosque lo ha tenido claro desde el principio. No ha dudado. Diez titulares indiscutibles y la figura del delantero centro rotatoria en función del rival.
Antes de la final sólo tiene dos dudas por despejar, mantener a Silva, del que preocupa su bajón físico, y elegir la referencia ofensiva.
El canario ha ido perdiendo brillantez según se ha ido agotando. En la semifinal ya sólo jugó una hora. Si es suplente entrará un extremo, Jesús Navas o Pedro Rodríguez, los dos han respondido a la perfección como revulsivos.
Arriba es Cesc el favorito. Siempre aparece ante Italia. Le marcó el penalti final en cuartos de la Eurocopa 2008 y el primer gol de esta competición. Aquel día ante defensa de cinco, un factor que fue decisivo para Del Bosque. El seleccionador espera noticias del rival. El resto del equipo titular lo sabe el país de memoria.
La ambición de una España que busca su tercera Eurocopa chocará con el 'estilo Prandelli', que busca un título para coronar el cambio. Es la nueva Italia, la tetracampeona alejada del conservadurismo y el 'catenaccio'.
Casi nadie esperaba que Italia alcanzara la final. Pero si algo tiene la azzurra es que sabe como lidiar con todo tipo de asuntos extradeportivos. Se han recuperado los lesionados y están todos preparados. De medio campo hacia delante está todo claro, Pirlo, Montolivo, Marchisio, De Rossi, Balotelli y Cassano, los más creativos.
KIEV, 20,45. TELE5.
