Las principales asociaciones del automóvil reaccionaron alarmadas ante el dato de matriculaciones de septiembre, cuando, con 56.595 vehículos, cayeron un 26,9 por ciento en relación con el mismo mes de 2009. Septiembre, mes tradicionalmente bajo en volumen de matriculaciones, se situó así en cifras homologables a las del mercado automovilístico de hace veinte años, como sucedió también en agosto y, sobre todo, julio, cuando no se alcanzaron las habituales cien mil unidades a pesar de ser cada año el periodo de más matriculaciones.
Los argumentos que tratan de explicar esta coyuntura desfavorable mezclan los factores propios del sector, como la decisión del Gobierno de no prorrogar las ayudas del Plan 2000E, agotadas en junio, y la subida del IVA en dos puntos porcentuales desde el 1 de julio, con los propios de la situación económica global, sustentados en las malas previsiones económicas y la desconfianza del consumidor.
Así, el tercer trimestre, el periodo inmediatamente posterior a la desaparición de las ayudas, acumuló 183.340 turismos matriculados, un 24,9% menos que las 244.105 matriculaciones del periodo enero-septiembre de 2009. A este panorama hay que añadir que los pedidos en concesionarios se ha retraído en septiembre un 50%, lo que implica una perspectiva de mercado mucho más pesimista para los dos o tres próximos meses.
Los fabricantes (Anfac), importadores (Aniacam), concesionarios (Faconauto) y vendedores (Ganvam) advierten de que en el último trimestre del año la situación aún puede empeorar y las apuestas se cifran en un cierre de mercado de entre 925.000 y 950.000 unidades, por debajo de ese 1,2 o 1,3 millones de unidades que se considera como mercado estructural en condiciones normales. A este respecto, el director general de Anfac, Luis Valero, no oculta que en el último cuadrimestre del año se matricularan unos 200.000 vehículos, lo que equivale a un promedio de 50.000 mensuales.
Así, el tercer trimestre, el periodo inmediatamente posterior a la desaparición de las ayudas, acumuló 183.340 turismos matriculados, un 24,9% menos que las 244.105 matriculaciones del periodo enero-septiembre de 2009. A este panorama hay que añadir que los pedidos en concesionarios se ha retraído en septiembre un 50%, lo que implica una perspectiva de mercado mucho más pesimista para los dos o tres próximos meses.
Los fabricantes (Anfac), importadores (Aniacam), concesionarios (Faconauto) y vendedores (Ganvam) advierten de que en el último trimestre del año la situación aún puede empeorar y las apuestas se cifran en un cierre de mercado de entre 925.000 y 950.000 unidades, por debajo de ese 1,2 o 1,3 millones de unidades que se considera como mercado estructural en condiciones normales. A este respecto, el director general de Anfac, Luis Valero, no oculta que en el último cuadrimestre del año se matricularan unos 200.000 vehículos, lo que equivale a un promedio de 50.000 mensuales.
