El contribuyente elegirá entre dos vías para pagar la plusvalía

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photo_camera El presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Abel Caballero.
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, afirma estar satisfecho porque veía “injusto” el impuesto local

La reforma del impuesto de la plusvalía municipal aprobada ayer permitirá al contribuyente elegir si paga por la ganancia real obtenida con la venta de suelo o por la resultante de aplicar el sistema objetivo, en tanto que estará exento de pago cuando la operación no reporte ganancia. El Ministerio de Hacienda destaca que con los cambios introducidos por decreto-ley se devuelve la constitucionalidad al impuesto para que refleje la realidad del mercado inmobiliario y para garantizar que los contribuyentes no tengan que pagarlo si venden un inmueble a pérdidas.

La norma restablece la exigibilidad del impuesto, que había quedado en suspenso con la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) del pasado 26 de octubre, lo que evita el riesgo de que los ayuntamientos sufran una merma de recursos que pueda suponer un aumento del déficit o el deterioro de los servicios que prestan a los ciudadanos. La última sentencia del TC estableció que el impuesto local sobre el incremento de valor de los terrenos de naturaleza urbana, conocido como la plusvalía, se calcula con un sistema objetivo y obligatorio ajeno a la realidad del mercado inmobiliario y a la capacidad económica del contribuyente.

 

CABALLERO, “FELIZ”

El presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Abel Caballero, valoró el decreto ley sobre plusvalías porque acaba con una situación de “confiscación” a los ciudadanos y se trataba de un impuesto injusto y en muchas ocasiones, excesivo. Caballero recordó que ya había solicitado que se derogase la normativa existente en cuando accedió a la presidencia de la FEMP, en septiembre de 2015.

El también alcalde vigués señaló que le “agrada especialmente” que si alguien no quiere aplicar el sistema objetivo pueda demostrar el valor de adquisición y de enajenación y que se calcule la plusvalía y la base imponible. “Muchas veces se calculaba una plusvalía y una base imponible que no tenía ninguna relación con la realidad. Incluso sin haber plusvalía, el sistema objetivo daba positivo, se le aplicaba el tipo y había gente con plusvalías negativas que pagaba cantidades que a veces eran el conjunto de la plusvalía y, por tanto, se producía una fenómeno de confiscación”, reconoció y afirmó que espera que ahora sea justo, porque el impuesto anterior “no lo era”.

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