Los fondos de inversión, y sobre todo los de deuda, se postulan como la mejor alternativa para los ahorradores que quieran conseguir la rentabilidad que ya no les darán los superdepósitos, limitados ahora por el Banco de España. Los fondos de inversión permiten invertir desde 500 euros en una cartera diversificada, con riesgos razonables y mayores facilidades fiscales que los depósitos.
El Banco de España recomendó a los bancos que limiten la rentabilidad de los depósitos para acabar con la 'guerra del pasivo', que en los últimos meses les llevó a ofrecer tipos de hasta el 4 por ciento anual. Estos altos tipos les permitían competir por el ahorro con otras entidades y obtener la financiación que les negaba los mercados, aunque por otra parte había un efecto indeseado, ya que encarecía los préstamos concedidos a empresas y particulares.
Para romper esta dinámica, la institución que dirige Luis María Linde sugirió de forma verbal a las grandes entidades, según fuentes financieras, que los nuevos depósitos no podrían remunerarse con más de un punto por encima del tipo oficial del Banco Central Europeo. Ese tipo ahora está en el 0,75 por ciento, lo que significa que el pago máximo a los ahorradores podría ser del 1,75 por ciento a menos de un año, del 2,25 por ciento a dos años y del 2,75 por ciento a tres. Las cuentas corrientes podrán ofrecer como máximo una rentabilidad del 1,25 por ciento. Para aquellos bancos que quisieran sobrepasar ese umbral, se les requeriría más capital a cambio, según las mismas fuentes.
PUESTO EN PRÁCTICA
Aunque el Banco de España no emitió una circular que haga oficial la medida, como consecuencia, buena parte de las entidades bancarias se aprestaron a seguir la recomendación y adaptaron sus depósitos a esos límites, es decir, que ya rebajaron los tipos de interés.
Ahora, el Banco Popular, por ejemplo, redujo la rentabilidad de su depósito Gasol del 4 al 1,75 por ciento, el mismo porcentaje al que se redujeron los depósitos de Sabadell, y el BBVA en el plazo de un año. Fuentes del mercado prevén que se establezcan penalizaciones para las entidades financieras que rebasen ciertos límites, a los que se les requerirá capital adicional en caso de que el número de depósitos con tipos de interés mayores que los recomendados supere el 15 por ciento de la cartera de la entidad financiera. Esto dejaría un margen a los bancos para ofrecer rentabilidades por encima de lo recomendado a sus mejores clientes.
Los expertos consultados apuestan por los fondos de inversión como alternativa, ya que permiten depositar el ahorro en diferentes tipos de activos y tienen mayores e importantes ventajas y facilidades fiscales.
Para romper esta dinámica, la institución que dirige Luis María Linde sugirió de forma verbal a las grandes entidades, según fuentes financieras, que los nuevos depósitos no podrían remunerarse con más de un punto por encima del tipo oficial del Banco Central Europeo. Ese tipo ahora está en el 0,75 por ciento, lo que significa que el pago máximo a los ahorradores podría ser del 1,75 por ciento a menos de un año, del 2,25 por ciento a dos años y del 2,75 por ciento a tres. Las cuentas corrientes podrán ofrecer como máximo una rentabilidad del 1,25 por ciento. Para aquellos bancos que quisieran sobrepasar ese umbral, se les requeriría más capital a cambio, según las mismas fuentes.
PUESTO EN PRÁCTICA
Aunque el Banco de España no emitió una circular que haga oficial la medida, como consecuencia, buena parte de las entidades bancarias se aprestaron a seguir la recomendación y adaptaron sus depósitos a esos límites, es decir, que ya rebajaron los tipos de interés.
Ahora, el Banco Popular, por ejemplo, redujo la rentabilidad de su depósito Gasol del 4 al 1,75 por ciento, el mismo porcentaje al que se redujeron los depósitos de Sabadell, y el BBVA en el plazo de un año. Fuentes del mercado prevén que se establezcan penalizaciones para las entidades financieras que rebasen ciertos límites, a los que se les requerirá capital adicional en caso de que el número de depósitos con tipos de interés mayores que los recomendados supere el 15 por ciento de la cartera de la entidad financiera. Esto dejaría un margen a los bancos para ofrecer rentabilidades por encima de lo recomendado a sus mejores clientes.
Los expertos consultados apuestan por los fondos de inversión como alternativa, ya que permiten depositar el ahorro en diferentes tipos de activos y tienen mayores e importantes ventajas y facilidades fiscales.
