Novagalicia Banco afirmó que trata de buscar 'lo mejor' tanto para la entidad como para los empresarios gallegos que invirtieron en la misma y que ahora, al ver peligrar esa aportación por las previsibles condiciones para la recapitalización, pidieron en una reunión con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) que se salvaguarde su inversión.
Fuentes de la entidad que preside José María Castellano destacaron que 'siempre' intenta 'lo mejor' para el banco y para los empresarios gallegos, pero están a la espera de conocer la normativa que se aplique para los accionistas de las entidades que reciban una inyección de fondos de la UE, que afectará, asimismo, a los tenedores de preferentes y a los bonistas, que deberán asumir una quita.
'Intentaremos, en la medida de nuestras posibilidades, que sea lo mejor para todos', afirmó un portavoz de la entidad financiera, que explicó que la salida de Roberto Tojeiro como consejero de NCG Banco-, pretende evitar un 'conflicto de intereses'. Tojeiro, que es presidente-consejero delegado de Gadisa, entró en el accionariado del banco gallego en diciembre del año pasado, al mismo tiempo que otros 16 empresarios gallegos.
La aportación de todos ellos al capital del banco es de 70,4 millones de euros y supuso que pasasen a controlar el 2,59%. Además, el propietario de Gadisa había sido nombrado consejero del banco unos meses antes, en septiembre de 2011, y con la aprobación del memorándum de entendimiento de junio estimó que habría una colisión entre sus intereses como inversor y su cargo en un órgano de dirección de la entidad.
REUNIÓN
Más allá, los empresarios que destinaron fondos a Novagalicia decidieron trasladar su malestar al FROB, algo que hicieron la semana pasada en una reunión y en la que no estuvieron todos presentes. Estos inversores reclamaron que se proteja su inversión y alegaron que las cifras sobre la situación de la entidad que conocían cuando tomaron la decisión se vieron modificadas posteriormente. De hecho, en marzo de 2012, cuando se cerraron y presentaron las cuentas del ejercicio anterior, el banco informó de que había levantado el asiento de fusión para proceder a hacer nuevas provisiones por 1.600 millones de euros.
Ante la inminencia de la decisión de la UE respecto a las condiciones y la inyección de ayudas a las entidades controladas por el FROB, varios de los socios de Novagalicia dieron un paso adelante para evitar ver diluida su participación en la entidad. Entre los inversores se encuentran Hierros Añón, Gadisa, San José, Hijos de Rivera, Jealsa, Copasa, Coren, Azkar, Rodman, Inveravante o Inversiones Galegas del Cable, que aglutina a varias empresas.
Por su parte, Novacaixagalicia, que tiene un 6,48% de Novagalicia Banco, también se vería afectada por estas condiciones, si bien ha indicado que no tomó decisiones al respecto.
Con relación a esta polémica, el portavoz del PPdeG, Antonio Rodríguez Miranda, reconoció ayer que su partido ve 'con preocupación' que inversores de Novagalicia Banco se sientan engañados por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y abogó por 'un acuerdo' entre las partes para que ellos no tengan que asumir 'errores que no son de su responsabilidad' y 'mantengan su participación' en la entidad.
'Intentaremos, en la medida de nuestras posibilidades, que sea lo mejor para todos', afirmó un portavoz de la entidad financiera, que explicó que la salida de Roberto Tojeiro como consejero de NCG Banco-, pretende evitar un 'conflicto de intereses'. Tojeiro, que es presidente-consejero delegado de Gadisa, entró en el accionariado del banco gallego en diciembre del año pasado, al mismo tiempo que otros 16 empresarios gallegos.
La aportación de todos ellos al capital del banco es de 70,4 millones de euros y supuso que pasasen a controlar el 2,59%. Además, el propietario de Gadisa había sido nombrado consejero del banco unos meses antes, en septiembre de 2011, y con la aprobación del memorándum de entendimiento de junio estimó que habría una colisión entre sus intereses como inversor y su cargo en un órgano de dirección de la entidad.
REUNIÓN
Más allá, los empresarios que destinaron fondos a Novagalicia decidieron trasladar su malestar al FROB, algo que hicieron la semana pasada en una reunión y en la que no estuvieron todos presentes. Estos inversores reclamaron que se proteja su inversión y alegaron que las cifras sobre la situación de la entidad que conocían cuando tomaron la decisión se vieron modificadas posteriormente. De hecho, en marzo de 2012, cuando se cerraron y presentaron las cuentas del ejercicio anterior, el banco informó de que había levantado el asiento de fusión para proceder a hacer nuevas provisiones por 1.600 millones de euros.
Ante la inminencia de la decisión de la UE respecto a las condiciones y la inyección de ayudas a las entidades controladas por el FROB, varios de los socios de Novagalicia dieron un paso adelante para evitar ver diluida su participación en la entidad. Entre los inversores se encuentran Hierros Añón, Gadisa, San José, Hijos de Rivera, Jealsa, Copasa, Coren, Azkar, Rodman, Inveravante o Inversiones Galegas del Cable, que aglutina a varias empresas.
Por su parte, Novacaixagalicia, que tiene un 6,48% de Novagalicia Banco, también se vería afectada por estas condiciones, si bien ha indicado que no tomó decisiones al respecto.
Con relación a esta polémica, el portavoz del PPdeG, Antonio Rodríguez Miranda, reconoció ayer que su partido ve 'con preocupación' que inversores de Novagalicia Banco se sientan engañados por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y abogó por 'un acuerdo' entre las partes para que ellos no tengan que asumir 'errores que no son de su responsabilidad' y 'mantengan su participación' en la entidad.
