Nueva Rumasa presentó ayer en los juzgados de Cádiz la solicitud de concurso de acreedores para cinco de sus bodegas de Jerez -Teresa Rivero, Zoilo Ruiz-Mateos, Garvey Jerez, Bodegas Valdivia y la comercializadora Unión de Grandes Bodegas-, según fuentes de la compañía.
Estas fuentes detallaron que la solicitud se fue presentada en los juzgados gaditanos y, aunque inicialmente Nueva Rumasa indicó que serían cuatro las bodegas de Jerez que se acogerían a esta situación, solicitó también la suspensión de pagos de la sociedad comercializadora Unión de Grandes Bodegas.
Por otro lado, el juzgado de Primera Instancia número 2 de Jerez de la Frontera levantó el embargo que pesaba sobre los derechos de cupo de la bodega Zoilo Ruiz-Mateos para la venta de vinos amparados por la Denominación de Origen de Jerez. La bodega Zoilo Ruiz-Mateos funciona en la actualidad 'con absoluta normalidad' y sirve los pedidos a sus clientes, tanto nacionales como internacionales.
Según Nueva Rumasa, la bodega también cuenta con viñedos propios, produce en exclusiva vinos de Jerez y es proveedora para otras bodegas de vinos con Denominación de Origen Jerez.
CONCURSO DE CLESA
Por su parte, el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra advirtió de su 'posible falta de competencia territorial' para llevar adelante el concurso de acreedores de la empresa láctea Clesa, según el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. El holding Nueva Rumasa, propietario de la láctea, presentó el pasado 21 de marzo en el citado juzgado pontevedrés el concurso de acreedores de Clesa, pese a que solicitó el preconcurso de acreedores en los juzgados de Madrid el 17 de febrero.
El consejero delegado de Nueva Rumasa, José María Ruiz-Mateos Rivero, explicó entonces que habían sido los abogados de la empresa los que aconsejaron presentar en Pontevedra el concurso de Clesa por varios motivos. Entre ellos, que las cotizaciones a la Seguridad Social de Clesa están en Pontevedra y que el centro de trabajo en propiedad más importante de la empresa láctea se encuentra en esta provincia, ya que la fábrica de Madrid está en régimen de alquiler.
Por otro lado, el juzgado de Primera Instancia número 2 de Jerez de la Frontera levantó el embargo que pesaba sobre los derechos de cupo de la bodega Zoilo Ruiz-Mateos para la venta de vinos amparados por la Denominación de Origen de Jerez. La bodega Zoilo Ruiz-Mateos funciona en la actualidad 'con absoluta normalidad' y sirve los pedidos a sus clientes, tanto nacionales como internacionales.
Según Nueva Rumasa, la bodega también cuenta con viñedos propios, produce en exclusiva vinos de Jerez y es proveedora para otras bodegas de vinos con Denominación de Origen Jerez.
CONCURSO DE CLESA
Por su parte, el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra advirtió de su 'posible falta de competencia territorial' para llevar adelante el concurso de acreedores de la empresa láctea Clesa, según el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. El holding Nueva Rumasa, propietario de la láctea, presentó el pasado 21 de marzo en el citado juzgado pontevedrés el concurso de acreedores de Clesa, pese a que solicitó el preconcurso de acreedores en los juzgados de Madrid el 17 de febrero.
El consejero delegado de Nueva Rumasa, José María Ruiz-Mateos Rivero, explicó entonces que habían sido los abogados de la empresa los que aconsejaron presentar en Pontevedra el concurso de Clesa por varios motivos. Entre ellos, que las cotizaciones a la Seguridad Social de Clesa están en Pontevedra y que el centro de trabajo en propiedad más importante de la empresa láctea se encuentra en esta provincia, ya que la fábrica de Madrid está en régimen de alquiler.
