El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) abrió ayer el proceso de ofertas vinculantes para la subasta de Novagalicia Banco (NCG), después de la ronda de contactos iniciales que ya mantuvo con los potenciales compradores, en una subasta que cuenta con el interés de cuatro bancos y varios fondos internacionales, y ante la que tanto Xunta como principales agentes sociales y económicos de Galicia reclamaron ayer el mantenimiento de carácter y decisión de la entidad en Galicia.
Los bancos y los fondos de inversión internacionales interesados en hacerse con Novagalicia deberán remitir al FROB sus ofertas vinculantes antes del próximo 13 de diciembre, con el fin de que el organismo pueda adjudicar la entidad nacionalizada este mismo año.
En un comunicado remitido ayer, el FROB explica que cuando reciba las ofertas de los interesados y 'siempre que una no resulte sustancialmente más favorable que el resto', abrirá una segunda fase en la que quedarán como mucho las tres mejores propuestas. De ese modo podrá exigir a estos tres interesados que remitan su oferta final, con lo que les da opción a mejorar la primera enviada al FROB.
En total son cuatro las entidades bancarias que hasta el momento se han mostrado interesadas en quedarse con el banco gallego (Santander, BBVA, CaixaBank y el venezolano Banesco), así como varios fondos de inversión, entre ellos Guggenheim, JC Flowers, Wilbuir Ross y Anchorage. Sin embargo, la gran duda está en si finalmente todas estas entidades presentarán ofertas en firme teniendo en cuenta que la gran mayoría de los interesados espera recibir algún incentivo.
VÍNCULOS DE LA ENTIDAD
Desde la Xunta esperan que el comprador mantenga el vínculo de la entidad con Galicia, y en ese sentido su presidente, Alberto Nuñez Feijóo, ya ha manifestado en varías ocasiones, la última de ellas el lunes, que confía en que el nuevo propietario dé crédito a las familias gallegas y mantenga los puestos de trabajo. Este último requisito es más fácil de conseguir si Novagalicia es adquirida por un fondo de inversión o de un banco extranjero, algo en lo que coinciden empresarios y agentes sociales de Galicia.
Núñez Feijóo afirmaba ayer que que el gobierno autonómico no tomará 'partido' en relación con el proceso de venta hasta que se hayan presentado todas las ofertas, porque 'es lo prudente' y es lo que nos interesa como gallegos', dejando claro sin embargo que son los gallegos los que deben salir beneficiados en el proceso.
En un comunicado remitido ayer, el FROB explica que cuando reciba las ofertas de los interesados y 'siempre que una no resulte sustancialmente más favorable que el resto', abrirá una segunda fase en la que quedarán como mucho las tres mejores propuestas. De ese modo podrá exigir a estos tres interesados que remitan su oferta final, con lo que les da opción a mejorar la primera enviada al FROB.
En total son cuatro las entidades bancarias que hasta el momento se han mostrado interesadas en quedarse con el banco gallego (Santander, BBVA, CaixaBank y el venezolano Banesco), así como varios fondos de inversión, entre ellos Guggenheim, JC Flowers, Wilbuir Ross y Anchorage. Sin embargo, la gran duda está en si finalmente todas estas entidades presentarán ofertas en firme teniendo en cuenta que la gran mayoría de los interesados espera recibir algún incentivo.
VÍNCULOS DE LA ENTIDAD
Desde la Xunta esperan que el comprador mantenga el vínculo de la entidad con Galicia, y en ese sentido su presidente, Alberto Nuñez Feijóo, ya ha manifestado en varías ocasiones, la última de ellas el lunes, que confía en que el nuevo propietario dé crédito a las familias gallegas y mantenga los puestos de trabajo. Este último requisito es más fácil de conseguir si Novagalicia es adquirida por un fondo de inversión o de un banco extranjero, algo en lo que coinciden empresarios y agentes sociales de Galicia.
Núñez Feijóo afirmaba ayer que que el gobierno autonómico no tomará 'partido' en relación con el proceso de venta hasta que se hayan presentado todas las ofertas, porque 'es lo prudente' y es lo que nos interesa como gallegos', dejando claro sin embargo que son los gallegos los que deben salir beneficiados en el proceso.
