Rubiás, A Granxa, Cadós y Recarei fueron de las primeras paradas de los troteiros, que ayer hicieron su primera aparición por las parroquias de Bande. Acompañados de la agrupación musical Airiños do Coto, los troteiros disfrutaron de la soleada jornada en A Baixa Limia haciendo honor a su nombre para anunciar la llegada del Entroido.
Desde la mañana hasta la noche, la comitiva recorrió una treintena de aldeas del municipio, donde les recibían con bandejas repletas de orejas de carnaval, bicas, empanadas, licores y una amplia sonrisa. Pazos fue una de las aldeas que este año se incorporó a la ruta por la petición expresa del único matrimonio que reside en el pueblo. En Sarreaus, los troteiros disfrutaron al ver la emoción con la que les recibió una vecina de 93 años. “Xa nos dicían que tiña especial ilusión por vernos, iso é algo que nos emociona moito”, comentaba una de las troteiras más veteranas, llevando de la mano a una pequeña de apenas tres años.
Tras diez horas de recorrido, donde hubo tiempo para posar en grupo frente a la capilla de San Andrés de Vilela, echarse un baile en mitad de un patio particular o perderse entre los hórreos y caminos que recorrieron para enlazar varias aldeas, los troteiros colgaron las chocas… hasta el domingo. El 11 de febrero está previsto que vuelvan a salir, esta vez por las calles de Bande, en una jornada que coincidirá con el Cocido troteiro y el gran desfile de carrozas y comparsas. La fiesta seguirá el día 12 con el “Luns feo”, el martes habrá “Feira Entroideira” y el miércoles, la despedida con el entierro de la sardina.
