Eiroás apadrinó, un año más, a los novios de la Voda da Pita. El enlace rememoró de nuevo la historia real de Antonio y Gumersinda (apodada “A Pita”), dos viudos que unieron sus caminos hace décadas. El solemne acontecimiento citó a los vecinos bajo una carpa instalada para la ocasión y que se convirtió en el improvisado escenario por el que pasaron destacados personajes de la sociedad.
Por ejemplo, el flamante rey inglés, Carlos III, que reclamó sus derechos sobre el “pendello de Ourense” ante los “alter ego” del alcalde, Jácome, y el presidente de la Diputación, Manuel Baltar. Los políticos locales hicieron un hueco en sus apretadas agendas para bailar una pieza al son de mariachis mientras se reprochaban sus rifirrafes “amorosos”. Las pitas no faltaron a la cita y escoltaron la ceremonia con sus coloridas alas.