Ni subvenciones, ni políticas favorecedoras directas de la natalidad como el cheque bebé parece que sean las medidas que hacen falta para favorecer el crecimiento demográfico.
Al margen de las dudas sobre la efectividad de algunas de las políticas más comunes para favorecer la natalidad, si se considera clave, en cambio, la inserción laboral de los jóvenes y mayores facilidades para que lleven a cabo sus proyectos de vida. Es preciso generar un aliciente para la permanencia de la juventud en su ciudad natal.
Esta es una de las conclusiones a las que se llegó en el tercer Faladoiro Económico que tuvo lugar una vez más en El Cercano. En él se dieron cita un grupo de profesionales, pertenecientes al Colegio de Economistas con la coordinación de David Martínez. Los asistentes fueron el Decano del Colegio, Guillermo Díez, Alfonso Pérez, Manuel Todeo, Beatriz Tejada, Myriam Puga y Carmen Sampayo. Acompañados en esta ocasión por Moncho Conde Corbal, Fundador de El Cercano.
Tras una intervención introductoria de David Martínez, donde se constataron los primeros datos que indican la desaceleración demográfica de la provincia de Ourense, se pasó después a debatir la situación y las posibles soluciones y alternativas.
Con el título de esta jornada “Análisis del envejecimiento en la población de Ourense” ya se había recogido una realidad, y es que los datos no engañan. En el año 1900 la provincia de Ourense tenía 420 mil habitantes. Así, se constata que, en más de cien años, la población, lejos de aumentar disminuyó hasta los 322 mil habitantes. Destacando que en los últimos 60 años se ha producido la mayor caída de población, descendiendo desde los 490 mil habitantes en 1950. Y esto aún continua, ya que, El Instituto Nacional de Estadística (INE), estima una reducción en el futuro, de 22 mil habitantes para los próximos 10 años,lo que dejaría a Ourense como una de las 4 provincias de España más envejecida. A todo esto cabe añadir que Ourense es la provincia con mayor migración de España, tal vez, porque el ourensano tiene familiares en otros países.
Los participantes situaron el problema en el contexto de España y en el de la política local y nacional,con una falta de visión estratégica para abordar el problema y la salida excesiva de jóvenes entre los 20 y 40 años de los últimos tiempos. El objetivo era conocer el problema, analizar los datos y luego plantear posibles soluciones. Estas fueron las principales ideas propuestas:
1. Apoyo a la Juventud. Hay que desarrollar políticas que favorezcan a la juventud antes que a la tercera edad.
2. Mejora Fiscal. Es necesario impulsar una política fiscal que favorezca el emprendimiento.
3. Conciliación laboral. Más que cheques bebés o medidas puntuales sobre la natalidad, es preciso crear un sistema de apoyo a la maternidad/paternidad en la que se extiendan las guarderías y la prolongación de las bajas maternales.
4. Integración de la Mujer. Que las bajas maternales no signifiquen, al final, la exclusión de las mujeres del mundo laboral.
5. Plan estratégico provincial. Evaluar el potencial productivo de la provincia para crear una estrategia de generación de riqueza y valor añadido que ponga a Ourense en el panorama económico.
6. Inversión educativa y formativa. Crear centros generadores de sinergias y de I+D+i para captar el desarrollo de los jóvenes ourensanos y atraer a más personas de fuera.
Políticas dirigidas a jóvenes
Es necesario generar políticas que hagan viable la vida laboral de los jóvenes para que encuentren una motivación que les haga quedarse en su ciudad. Este punto fue remarcado por Alfonso Pérez, que indicó que “Este problema hay que contextualizarlo en España, donde en los próximos 15 años se estima que se podrían perder 1 millón y medio de habitantes”. Se puso de manifiesto que en Ourense doblamos la cantidad de gente entre 20 y 40 años que emigra respecto al resto de provincias gallegas y a todo ello hay que añadir que estos jóvenes marchan formados y con idiomas.
El apoyo a la retención de estos recursos humanos es fundamental, tal y como se produce en otros países como Francia, donde hay grandes políticas de apoyo, no para regalar nada, sino para estimular el ahorro, el consumo y la vida de las personas. No se puede pretender que la juventud quiera desarrollar su vida en la provincia de Ourense, si no recibe una compensación económica y de promoción para su plan de vida. Los salarios dignos y las posibilidades de un crecimiento personal, son vitales. Así lo destacó Beatriz Tejada que coincide con el planteamiento, y añade más: “Ese chaval hipercualificado se marcha porque en el Polígono de San Cibrao cobra 800 euros al mes”. No es preciso identificar la excelencia, se puede generar valor hasta en una panadería, los jóvenes quieren sinergias no ayudas.
No se pueden realizar políticas de mantenimiento sobre la población más envejecida. Es preciso considerar que los jóvenes que marchan hoy, es muy difícil que regresen en el futuro, por lo que no hay que favorecer el regreso, hay que trabajar sobre la no marcha del joven formado hacia otros países. Manuel Todea, lo reflejó en su análisis “de qué sirve tener una universidad de derecho, si luego el joven universitario se marcha de Ourense”.
Favorecer el empleo
Todos estuvieron de acuerdo en que la potenciación del empleo no se tiene que centrar en políticas de subvención. Y sobre todo si estas ayudas, luego no tienen retorno en la provincia, generándose una fuga hacia otros mercados.
Es fundamental una potenciación del emprendimiento, que pase por la eliminación de trabas a la hora de crear una empresa o establecerse como autónomo. Se debe mejorar la eficiencia y simplificación en los trámites burocráticos que posiciona a España como un país complejo para la creación de empresas. Guillermo Díez por su parte, resaltó que “ hay que favorecer la actividad de los autónomos, y en concreto, aliviar la carga de la seguridad social en este colectivo, como ocurre en otros países”. Los asistentes remarcaron que no es preciso el gasto en subvenciones no direccionadas, siendo mejor su aplicación para favorecer el empleo, ya que tienen un resultado sobre la renta mucho mejor.
Otro aspecto importante es la mejora en las políticas de conciliación familiar, fundamentalmente aquellas que mejoren el crecimiento demográfico, en coordinación con la vida laboral. Como puede ser las inversiones en guarderías, permisos de paternidad y maternidad. No en aspectos de mejora solamente económicas como gratificaciones fiscales o similares actuaciones.
En este sentido Myriam sumó argumentos al desarrollo como verdadero impulsor del crecimiento demográfico, ”la democratización de la supervivencia hasta la vejez es la revolución social demográfica más importante experimentada por la sociedad”. Es decir, el envejecimiento demográfico no es malo en sí, es malo cuando es a costa de la disminución en la pirámide poblacional, de los jóvenes y los niños. Es, por tanto, una señal de desarrollo en los pueblos. A lo que hay que añadir que, en cualquier caso, tal y como puso de manifiesto Carmen Sampayo, “los jóvenes ya no se mueven solamente por el ocio como amarre en España”, buscan como factor prioritario el empleo, aunque tengan que salir a exterior.
Potencial productivo
Respecto a movilizar el potencial productivo de la zona, David Martínez quiso traer a colación como otras ciudades en otras partes del mundo han reaccionado ante situaciones similares. Es el caso de Austin, Estados Unidos. Si Silicon Valley domina la tecnología, Austin es la capital de las StartUps en el mundo a pesar de tener una población de tan sólo 100.000 habitantes”. Y todo fue una reacción de los dos principales empresarios de la ciudad, que cuando empezaron a ver que decaía el negocio minero decidieron replantear una ciudad muy pequeña. Invirtieron su capital riesgo en crear dos importantes centros de estudio líderes en tecnología. Hoy en día la gente quiere ir allí a formarse y a poner en marcha sus ideas de emprendimiento. Por lo que la educación, debe ser un motor fundamental para el proceso productivo de la provincia de Ourense.
Moncho Conde Corbal intervino en este sentido, poniendo de manifiesto, que en Galicia hay otras ciudades, como Vigo, donde se abordan las acciones de emprendimiento de una manera más ágil y coordinada con el empresariado actual. “¿Cómo es posible que haya tantos recursos en Ourense y no se les saque rendimiento? ¡Ni sabemos que existen! Tenemos la base pero no hay voluntad. Tenemos una ciudad magnífica porque hay cosas que se mueven ya ellas solas”. Sin salir de Galicia, hay provincias donde se dan más facilidades que en Ourense.
Si queremos mantener a la población, es preciso crear y generar un aliciente, que primero mantenga la población originaria, que atraiga a más población y ello dará origen a un nuevo impulso de natalidad. En este sentido, el desarrollo de Ourense, parece que no pasa por la búsqueda de una gran inversor externa, que implante un gran centro productivo. Manuel Todea, puso de manifiesto que “sectores como el forestal, o todo lo vinculado al sector primario, sería una buena lanzadera”. También se habló de la necesidad de generar un núcleo de población, que esté altamente cualificado en actividades de formación profesional. Necesarios para desarrollar el potencial productivo de la provincia.
El objetivo debe ir encaminado a poner a Ourense en el panorama económico, potenciando unos recursos propios que generen creación de riqueza y valor añadido, capaces de captar el desarrollo personal de los jóvenes ourensanos y atraer a personas de otras áreas geográficas, que encuentren en la provincia sinergias y políticas de I+D+i no localizadas en sus zonas de origen.
Estas fueron las aportaciones de los asistentes al Faladoiro Económico, promovido por el Colegio de Economistas de Ourense. En esta ocasión se discutieron puntos de vista sobre la situación demográfica de la provincia. En la próxima jornada que se desarrollará en noviembre, se afrontará otro factor externos de la economía: las Administraciones Públicas.
