ECONOMÍA

La diferencia en el recibo de la basura supone hasta 50 euros, según la ciudad

ourense. 17 nov 2010. camiones contenedores de ecourense.
photo_camera Flota de camiones de recogida de residuos sólidos urbanos.

Un ayuntamiento como el de Ourense emite una media de 75.000 recibos por la tasa, por lo que multiplicar esa cantidad por el importe que se cobra y hacerlo por el importe máximo y mínimo de otras, da lugar a diferencias grandes, lo que es difícil de asumir siendo similares.

Dice la Ley de Haciendas Locales en relación a las tasas por la prestación  de servicios en los que no concurre el sector privado que,  la fijación de su importe por la prestación de un servicio no podrá exceder en su conjunto del coste real del servicio del que trate; y que para determinar dicho coste se tomarán en consideración todos los gastos directos, pero también aquellos indirectos que contribuyen a la formación de su importe, lo que debería hacer en principio, que estos precios finales fuesen similares en los ayuntamientos de un mismo tamaño.

 
Pero de unos a otros la tasa varía de forma considerable y así podemos encontrar diferencias de hasta 50 euros por ayuntamientos urbanos en Galicia  con respecto a otros en el caso de la recogida diaria, aunque de casi cien euros si solo tenemos en cuenta su coste global sin diferenciar cualidades. Si ello tiene incidencia en la cuenta de resultados anual de una economía doméstica, imagínenlo en términos agregados. 


Un ayuntamiento como el de Ourense emite una media de 75.000 recibos por la tasa, por lo que multiplicar esa cantidad por el importe que se cobra y hacerlo por el importe máximo y mínimo de otras, da lugar a diferencias grandes, lo que es difícil de asumir siendo similares. Entre las que cuentan con el servicio más caro está la capital de Ourense, la segunda ciudad más donde la tasa de recogida supone un mayor coste, después de Pontevedra, les cuesta acada hogar 125,70  y 131,58 euros anuales respectivamente. En el otro extremo una familia que viva en Ferrol desembolsa 52,68 euros.  Pero dentro de este mapa heterogéneo en el cual cada ayuntamiento “vende y compra” de forma autónoma, el importe varia, en los propios ayuntamientos según exista o no un punto de recogida de basura o si esta es o no diaria. 


Así si los ourensanos residen donde existe su propio punto de recogida su factura se ve reducida a la mitad, con lo que pagarían 57,30€ al año. En A Coruña se presenta  la mayor disparidad de precios, que caracteriza esta  parte de la gestión de  los residuos urbanos de Galicia. En este ayuntamiento puede estar sujeto a tres tasas de recogida diferentes según la calle en la que residan. El ayuntamiento utiliza el término “categoría”, aludiendo a las calles, y así, en las categorías uno y dos, abonan la tasa en su importe máximo: 66,86 euros anuales, pero si residen en calles de la categoría tres y cuatro pagan 62,40, y los de quinto o sexto rango, 58,69 euros. 


En Lugo el servicio de basura les cuesta 86,52 euros por vivienda aunque como en otras urbes la tasa se reduce a la mitad 42,24€ en las zonas por las que el camión no pasa todos los días. En Vigo, cada familia paga 84,10€ al año. En Santiago, cada vivienda paga un término fijo de 74,04 euros  año y en este caso el importe puede subir  en función del agua que se consuma en cada hogar; y así, por cada metro cúbico que pase de 10 al mes encarece el recibo de basura en 17 céntimos. Esta heterogeneidad en los precios también se observa en el resto de los municipios gallegos. Pero no todo son tasas, quedan algunas poblaciones en Galicia, pequeños ayuntamientos, que no cobran a los vecinos por la recogida de basura. Este es el variopinto mapa gallego, tan desigual en tantas cosas y donde la basura, su recogida, es simplemente un ejemplo más.

Te puede interesar