Supone un ahorro de seis céntimos en litro
Repsol, Cepsa, BP y Galp, las grandes petroleras en España, empiezan a reaccionar ante el fenómeno de las gasolineras low cost plantando cara a grupos como Carrefour, Eroski, Alcampo y E.Leclerc, principales impulsores de ese nuevo modelo de distribución de carburantes. El precio medio de las grandes petroleras, habiendo estado por encima de los de grandes superficies y las gasolineras de marca blanca, ahora, no sólo ha reducido su brecha sino que en algunas de sus gasolineras, tienen precios incluso más baratos que los que tienen estaciones de servicio, como Carrefour, Eroski, la propia E.Leclerc u otras redes de gasolineras libres o de marca blanca.
Si en un un primer momento apenas reaccionaron a la guerra de precios de los grandes supermercados al considerar que era un fenómeno pasajero, o de corto alcance, han entrado ahora, de lleno, y firmas como Repsol o Cepsa mayores distribidoras por cuota de mercado, se han lanzado al modelo low-cost con la apertura de una treintena de ellas en España. Además, las menores barreras burocráticas a su apertura y el crecimiento de estos puntos de suministro está apoyado en un cliente que prefiere pagar menos por el carburante y renunciar a otros servicios tradicionales, como la tienda o la atención en el surtidor. La filosofía de estas gasolineras es repostar y pagar con una tarjeta de crédito, en el mismo sitio. A cambio, los precios de la gasolina y el gasóleo son de media 6 céntimos por litro más baratos.