Padel Prix se ha mudado a nuevas instalaciones en el polígono de San Cibrao. Los promotores del negocio deportivo no dudan en calificar su crecimiento de "exponencial".
La práctica del padel sigue en línea ascendente, con un crecimiento sostenido. Los conocedores de la disciplina ignoran cuándo se estabilizará el número de personas que se inclinan por hacer el deporte de las palas y, fundamentalmente, hacerlo en pista cubierta. El negocio por lo tanto sigue yendo viento en popa. En Ourense la situación es similar y el número de personas que hacen deporte con esta modalidad sigue e aumento. Padel Prix es una firma sustentada con capital local que comenzó en una nave del polígono industrial de San Cibrao das Viñas pero que ha ido creciendo de forma exponencial, hasta el punto que se ha tenido que mudar dentro del poligono a otras instalaciones más amplias y con nuevos servicios acordes a las nuevas necesidades. Según un estudio realizado por la empresa Media Sport Marketing, el número de practicantes en España en la actualidad supera los dos millones de personas y el mercado potencial llega a los ocho millones, eso sí, a la vuelta de unos cinco años, según la citada fuente.
La actividad en Padel Prix va a más cada día y la referencia de la empresa es José Enrique Conde Iglesias, liderando un proyecto que comenzó de forma tímida y que se ha consolidado rápidamente. Recuerda que Padel Prix "empezó como una tienda de deportes especializada en artículos de padel y tienda on line, con una pista que se utilizaba para probar las palas y el resto de material deportivo que adquirían los clientes". Sin embargo, pronto las costuras de la empresa resultaron estrechas y necesitaron ampliar las instalaciones. Debido a las propias necesidades de la tienda, las clases que comenzaron a impartirse en las pistas y otro tipo de servicios decidieron pasar a las nuevas instalaciones hace tres meses, también dentro del polígono de San Cibrao.
Las dependencias incluyen la tienda para la adquisición de material relacionado con la práctica del padel, pero también se ha pasado de tener una única pista en las primitivas instalaciones a contar en las nuevas con siete pistas, cinco de ellas panorámicas y de alta competición. La empresa, como recuerda su representante, imparte docencia para los que se quieran iniciar en la práctica de este deporte, pero también para los que quieran mejorar su nivel a través de técnicas más especializadas. José Enrique reconoce que el crecimiento está siendo "exponencial" y en estos momentos tienen 163 alumnos entre la escuela y las clases de perfeccionamiento. Según las tarifas que difunden en su web, Padel Prix tiene una tarifa de 20 euros mensuales para socios individuales y si la cuota es familiar el recibo es de 30 euros. Si se elige el bono anual, el precio es de 180 euros por socio individual y 300 para la tarifa familiar. Padel Prix también aplica tarifas por la reserva de las pistas, por las cuotas de las clases, por la escuela, etc.
La apuesta por este negocio combina la práctica del padel con la venta del material, para lo que ya no solo tienen la tienda física, sino que a través de Internet distribuyen también el material.
José Enrique dice que la apuesta por este negocio está relacionada con un creciente interés por este deporte, pero también porque ocupar el tiempo libre dentro de la cultura del ocio y de la práctica de deporte. Señala que "la demanda está siendo alta" y que el modelo de negocio engloba el alquiler de las pistas, las clases. el servicio de tienda, incluso el de la cafetería dentro de las propias instalaciones y la venta on line. De todos modos, a futuro José Enrique Conde avanza que una de las apuestas es "prestar servicios de consultoría a empresas", sobre todo en lo que se refiere a la organización de ligas, trofeos. etcétera. Y si la apuesta actual acompaña, Padel Prix puede plantearse a medio plazo una apuesta en torno a la práctica del tenis, que se ha quedado en los últimos años con pocos espacios en la ciudad y el entorno. José Enrique señala que "nuestra meta es montar una sala de fitnes y un restaurante, pero también no descartamos habilitar espacio para un par de pistas para escuela de tenis". Puede ser una vía de crecimiento para una actividad deportiva que practica cada vez más gente en edades comprendidas entre los 18 y los 55 años.
