El sector en Galicia apuesta por la adaptación a nuevas habilidades distintas a la industria tradicional
Imaginación para cambiar el mundo y creatividad para materializar las ideas son las premisas sobre las que han debatido en el Círculo de Empresarios de Galicia expertos en robótica colaborativa y empresarios de la comunidad. "La robótica colaborativa consiste en robots que, cumpliendo una normativa, se mueven e interactúan en el mismo espacio que los trabajadores", ha explicado en la primera de las charlas Francesc Cortes, investigador principal en robótica y automatización del centro tecnológico catalán Leitat.
El encuentro ha contado con la presencia, entre otros, de Francisco Puga, presidente de Delta Vigo; Juan José Areal, responsable del proyecto de innovación y procesos de PSA; o Enrique Mallón, secretario general de ASIME. "Consideramos esencial que las empresas, en sus inicios y procesos, incorporen la cooperación de máquinas y personas en sus compañías como ventaja competitiva porque estamos convencidos de que la innovación permanente es lo que hace diferenciar a las empresas en el mercado y competir de manera global", ha explicado Patricia García, presidenta del Círculo de Empresarios de Galicia.
"Galicia es industria, y nuestra industria está muy automatizada, es muy competitiva y Galicia es lo que es gracias a nuestras exportaciones, y si exportamos es porque nos compran en sectores como la automoción, la pesca o el agroalimentario. Eso es síntoma de que se están haciendo bien las cosas", ha añadido.
La incorporación de robots al sistema productivo es a menudo percibida como una amenaza por los trabajadores. Sin embargo, en opinión de Juan Cividanes, director general del IGAPE, ese es un debate casi superado, pues en él se centraron las jornadas del año pasado. "Este año lo estamos centrando más en casos concretos de personas que tienen que transformar sus habilidades para apoyar esa transformación de la industria. Yo diría que las habilidades que se requieren hoy son distintas a las que exigía la industria tradicional", ha dicho Cividanes, que habla de digitalización, programación o inteligencia artificial, y cree que en Galicia hay oportunidades y que el conocimiento acumulado de la industria gallega ha de ser "el punto de partida para que luego haya esa generación de empleo". La automatización destruye puestos actuales de trabajo", ha apuntado García, "pero abre puertas a otros puestos basados en el conocimiento. Los robots los tiene que hacer alguien, a los robots hay que mantenerlos, van a ser parte de la empresa, no van a sustituir todos los puestos de trabajo. De hecho, Galicia tienen un gran potencial".
