En declaraciones a EURO este experto invita a las empresas de pequeño tamaño de Ourense "a que se aprovechen de los nuevos sistemas"
Una empresa que decida poner en marcha un departamento de exportación deberá invertir entre 120.000 y 150.000 euros, lo que hará imprescindible que su volumen de negocio supere como mínimo 600.000 euros anuales. Esos son los cálculos que hace Jesús Albizu, economista experto en comercio internacional que participó en días pasados en una actividad organizada por la Confederación Empresarial de Ourense (CEO) bajo el lema "¿Cómo vender mejor en el exterior?" No todas las empresas disponen de esa capacidad, sobre todo en Ourense, de ahí que se necesite la colaboración y la cooperación para resolver esas trabas si las empresas quieren conquistar los mercados exteriores. Señala Albizu que "uno de los grandes problemas de la economía ourensana es el pequeño tamaño de sus empresas". Añade que hay oportunidades para vender fuera pero "el tamaño supone un freno". En su intervención en el acto en la sede empresarial, Jesús Albizu fue claro al señalar que siendo la exportación una excelente oportunidad comercial, “no es igual para todas las empresas” e incluso las hay que “carecen de capacidad para asumir un proceso de ese calibre". En este sentido indicó que “cuando vas fuera hay que saber que a pesar de que hay cosas que parecen indicar que todo es igual que aquí, la realidad es bien distinta, pues existen grandes diferencias de todo tipo”.
Hizo hincapié en que “la exportación será buena si ayuda a conseguir el objetivo principal de la empresa; sino, hay que dejarlo”. Eso vale incluso en los casos “en que poseas productos exportables”.
En declaraciones a EURO este experto invita a las empresas de pequeño tamaño de Ourense "a que se aprovechen de los nuevos sistemas que la propia globalización nos está permitiendo, como son los nuevos sistemas de trabajo que acortan distancias con respecto al cliente final y que permita a las empresas pequeñas que lo hagan bien, captar clientes en el exterior". Por lo tanto una de las recetas que propone este experto en comercio internacional es la cooperación. Bajo su punto de vista "no solo sería conveniente, sino que es necesario" que haya planes conjuntos entre las empresas o entidades empresariales que las agrupen. Sin embargo, no todo es positivo, al menos como lo sostiene la teoría, de ahí que reconozca que "el problema es que la cooperación es complicada porque las empresas se miran de reojo, como si fuesen potenciales competidores, pero en el mercado internacional tu gran competidor en el mercado interior puede ser tu gran aliado".
En algunos sectores, caso del primario, se están organizando misiones comerciales para poder exportar. Un ejemplo: los consejos reguladores del vino suelen trazar planes de exportación del que se benefician las bodegas. Ese es uno de los caminos, según Jesús Albizu, que pide potenciar más esa intervención, como también pide a las entidades públicas que jueguen ese papel. "Tienen que cambiar su mentalidad y método de trabajo", advierte este experto en comercio internacional.
En su opinión "la complementariedad de las empresas es fundamental, como lo son las sinergias". En la charla de la CEO habló también de otra alternativa: la exportación externalizada, que se realiza “a través de una empresa o persona externa que cuenta con la infraestructura y los conocimientos para asumir la exportación”.
