La Xunta, molesta por la falta de comunicación desde el Ejecutivo central, envió una carta este viernes dirigida al Ministerio de Interior para que la circulación en la frontera se ajuste a las medidas sanitarias establecidas por Feijóo, que limitan los movimientos con las excepciones habituales: sanidad, trabajo, educación.
La Xunta de Galicia ha enviado este viernes una carta dirigida al Ministerio de Interior para solicitar la "máxima colaboración" del Gobierno en la garantía del cierre perimetral de la Comunidad ante la apertura de fronteras de Portugal este sábado. Ante la falta de comunicación por parte del Ejecutivo, el gobierno gallego ha solicitado que la circulación entre Portugal y el sur de Galicia se ajuste a las medidas sanitarias establecidas por la Xunta, en condición de autoridad competente delegada a los efectos del estado de alarma, que limitan los movimientos con las excepciones habituales: sanidad, trabajo y educación.
Por lo expuesto, se solicita la máxima colaboración de esa administración a los efectos de asegurar el cumplimiento de la medida y que, por tanto, los desplazamientos por la frontera se ajusten a la regulación establecida en las indicadas normas.
Esta mañana el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, lamentaba la ausencia de comunicación oficial por parte del Gobierno central sobre este asunto: "A día de hoy no tenemos información y no sabemos cuáles son los efectos de esta apertura de la frontera", ha asegurado el vicepresidente primero de la Xunta.
La apertura de la frontera, señalan desde la Xunta en la misiva, supone que "todos los pasos quedarán abiertos y España eliminará también sus controles". No obstante, Galicia seguirá cerrada perimetralmente, por lo que los movimientos entre el sur gallego y el norte de Portugal quedarán "circunscritos a razones justificadas", aunque ante las dudas, la Xunta pide concreción al Gobierno.
Apertura de fronteras
La carta de la Xunta llega un día después de que Portugal anunciara la apertura de su frontera terrestre con España este sábado 1 de mayo. Las fronteras con el país luso permanecen cerradas desde el 31 de enero excepto para el tránsito de nacionales y residentes, transporte de mercancías y trabajadores transfronterizos, por los pasos autorizados.
