El Laboratorio de Consumo gallego detectó el 25% de los productos defectuosos hallados en España

Comercio impulsa una base de datos sobre juguetes peligrosos

La directora xeral de Comercio, Nava Castro (d), y la gerente del Instituto Galego de Consumo. (Foto: ARCHIVO)
La inexistencia de una base de datos específica sobre accidentes relacionados con juguetes peligrosos o defectuosos motivó a la dirección xeral de Comercio a estudiar, junto con la Consellería de Sanidade, la puesta en marcha de un hilo conductor entre ese departamento y los hospitales gallegos para obtener información sobre ese tipo de incidencias.
De ahí que el departamento autonómico, en colaboración con Sanidade, busque crear un sistema de recopilación de datos para contar con información sobre incidencias relacionadas con juguetes, con el fin de analizar su gravedad y si se deben a elementos defectuosos o 'a su mala utilización'.

El Laboratorio de Consumo de Galicia, único en todo el Estado que analiza desde productos de consumo a mecánicos, de tipo téxtil o eléctricos y químicos, localizó el 25 por ciento de todos los juguetes peligrosos detectados en 2010 en España y un total de 22 incumplimientos 'graves' en lo que va de año. En total, de las 447 alertas comunicadas el pasado ejercicio, Galicia cuenta con 87, el mayor número de todo el Estado.

A pesar de ello,para la directora xeral de Comercio, Nava Castro, estas cifras 'no quieren decir' que Galicia sea la Comunidad 'donde más problemas hay' , sino que es la que 'localiza más' elementos defectuosos por realizar una tarea de inspección 'bastante asidua'.

Ante estas circunstancias, tanto Nava Castro como la gerente del Instituto Galego de Consumo, María Jesús Muñoz Chesa, recomiendan incrementar la precaución a los padres ante los juguetes infantiles que emplean sus hijos durante el verano y, sobre todo, que sean adecuados a la edad mental y actividades físicas del niño, sin nada que sobrepase sus capacidades.

El producto debe venir con el logo de CE, el nombre y dirección del responsable, instrucciones de manejo (que deberán ser consultadas por los padres), en el idioma oficial, que no tenga bordes cortantes y 'sin fuente de alimentación' de menos de 24 voltios. En el caso de los juguetes náuticos, es necesario prever problemas de desinflado y cerciorarse de que las cuerdas tengan un máximo de 220 milímetros (para menores de tres años), ante riesgo de ahogamiento.

Otros problemas detectados por el Laboratorio están relacionados con láminas de plástico, materiales expandibles (cuyo tamaño aumenta mucho en caso de ingesta), bordes cortantes, máscaras y cascos con escasa ventilación, proyectiles o piezas pequeñas.

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