El nuevo conselleiro mayor del Consello de Contas, Antonio López, anunció hoy que este organismo informatizará todas sus auditorías para intentar reducir los plazos de las fiscalizaciones y las demoras en la comisión de los informes anuales de las cuentas de las instituciones, asociaciones y fundaciones públicas de Galicia.
En una entrevista con Europa Press, López, que fue designado ayer con la unanimidad de los cinco miembros del Consello de Contas, aseguró que continuará con la labor iniciada por su antecesor en el cargo, Luciano Fariña, de ‘actuar con la máxima transparencia’ en la fiscalización de las cuentas públicas.
A pesar de ser designado por el propio Consello de Contas, López tendrá que esperar a finales de este mes para ser nombrado, de forma oficial, por el presidente gallego, Emilio Pérez Touriño, y tomará posesión del cargo a principios de septiembre.
No obstante, subrayó que su objetivo es continuar con el proceso de informatización de la institución, ya iniciado, para ‘agilizar’ las fiscalizaciones de las cuentas que, según dijo, se pueden demorar hasta un año y algunos meses. Así, recordó que los informes de las cuentas de 2004 se recibieron a mediados de 2005 y ‘aún tuvieron que pasar por más trámites de petición y análisis’, dijo al referirse a su entrega en el Parlamento gallego el pasado viernes.
Por ello, indicó que con la informatización se ‘mejorarán’ los plazos pero también reconoció que el desfase de tiempos será ‘más aparente que real’. ‘Se intentarán acortar los plazos aunque no será por mucho’, reconoció.
Asimismo, precisó que intentará mejorar los problemas estructurales de la institución, especialmente la falta de espacio y la situación del personal laboral ya que ‘al ser de libre designación tiene dificultades de acceder a otras instituciones’.
CIDADE DA CULTURA
López también se refirió al informe de 2004, que detectó graves irregularidades en las cuentas de la Cidade da Cultura, y señaló que el trabajo del Consello de Constas es, precisamente, investigar su estado financiero. Por ello, anunció que en los próximos años habrá nuevos informes sobre esta cuestión porque precisó que la Cidade da Cultura es una entidad pública que ‘también’ tiene que rendir cuentas.
También criticó la falta de colaboración de algunas instituciones, especialmente, las entidades locales, y apostó por poner en marcha medidas ‘más efectivas’ para obligarlas a cumplir con el Consello de contas.
En relación con la tardanza en la elección de los tres nuevos miembros del órgano fiscalizador --de más de año y medio--, el conselleiro maior aseguró que se debió a que no existía el ‘consenso’ apropiado. De esta forma, no descartó la existencia de un ‘componente político’ en su designación porque, según precisó, el Parlamento ‘está formado por partidos políticos’. No obstante, puntualizó que, una vez que se llegó al consenso, ‘lo más importante es trabajar con independencia’.