La secretaria general da Igualdad de la Xunta, Susana López Abella, indicó hoy que las cifras de violencia de género siguen siendo 'escandalosas', con tres mujeres muertas en el 2011 y otra más este año en Galicia, por lo que insistió en la necesidad de denunciar a los maltratadores, para proteger a las víctimas.
En declaraciones a los medios, López Abella dijo que la violencia de género es 'una lacra muy difícil de radicar', por lo que hizo 'una llamada de atención' a los amigos y familiares de las posibles víctimas para que 'cuando vean la más mínima señal, apoyen a la mujer que sufre malos tratos'.
'Es una lacra difícil de erradicar, y por eso quiero reiterar la necesidad de interponer denuncias, para poner en marcha los protocolos de protección de las víctimas', dijo López Abella, quien también lamentó el 'balance terrible, con trece muertes en lo que va de año en España'.
En ese sentido, señaló que a pesar del 'esfuerzo en materia de sensibilización' de las administraciones públicas, todavía queda 'mucho camino por recorrer', porque las cifras de víctimas 'son escandalosas y, detrás de ellas, hay un componente humano tremendamente delicado'.
'No podemos hablar de que exista un grupo determinado de mujeres, porque los malos tratos pueden producirse en cualquier clase social y con personas que tengan distintos niveles de formación, porque la violencia no es otra que la demostración palpable de que existe un déficit de igualdad en nuestra Comunidad y en el resto de España', dijo la representante de la Xunta.
En ese sentido, indicó que su departamento está trabajando con la Consellería de Educación y Cultura, porque uno de sus 'pilares fundamentales pasa por seguir trabajando en este ámbito'.
Apuntó que hay informes del Observatorio Estatal de Violencia de Género y otros de ámbito europeo que indican que 'se reproducen estereotipos que deberían estar erradicados, propios de tiempos pasados', que es necesario 'eliminar'.
López Abella viajó hoy hasta Lugo para presentar el balance anual de violencia de género en esta provincia, en la que 226 mujeres tienen órdenes de protección y medidas cautelares, 36 son perceptoras de ayudas económicas, 58 están integradas en programas de atención psicológica, 33 participan en cursos de autoprotección y 30 son víctimas con sistemas de telelocalización.
De las 1.348 órdenes de protección y medidas cautelares comunicadas el pasado año por los juzgados de Galicia, un 16% hacen referencia a mujeres con domicilio en Lugo, una provincia en la que hay seis agresores controlados por las fuerzas del orden mediante medios telemáticos.
'Es una lacra difícil de erradicar, y por eso quiero reiterar la necesidad de interponer denuncias, para poner en marcha los protocolos de protección de las víctimas', dijo López Abella, quien también lamentó el 'balance terrible, con trece muertes en lo que va de año en España'.
En ese sentido, señaló que a pesar del 'esfuerzo en materia de sensibilización' de las administraciones públicas, todavía queda 'mucho camino por recorrer', porque las cifras de víctimas 'son escandalosas y, detrás de ellas, hay un componente humano tremendamente delicado'.
'No podemos hablar de que exista un grupo determinado de mujeres, porque los malos tratos pueden producirse en cualquier clase social y con personas que tengan distintos niveles de formación, porque la violencia no es otra que la demostración palpable de que existe un déficit de igualdad en nuestra Comunidad y en el resto de España', dijo la representante de la Xunta.
En ese sentido, indicó que su departamento está trabajando con la Consellería de Educación y Cultura, porque uno de sus 'pilares fundamentales pasa por seguir trabajando en este ámbito'.
Apuntó que hay informes del Observatorio Estatal de Violencia de Género y otros de ámbito europeo que indican que 'se reproducen estereotipos que deberían estar erradicados, propios de tiempos pasados', que es necesario 'eliminar'.
López Abella viajó hoy hasta Lugo para presentar el balance anual de violencia de género en esta provincia, en la que 226 mujeres tienen órdenes de protección y medidas cautelares, 36 son perceptoras de ayudas económicas, 58 están integradas en programas de atención psicológica, 33 participan en cursos de autoprotección y 30 son víctimas con sistemas de telelocalización.
De las 1.348 órdenes de protección y medidas cautelares comunicadas el pasado año por los juzgados de Galicia, un 16% hacen referencia a mujeres con domicilio en Lugo, una provincia en la que hay seis agresores controlados por las fuerzas del orden mediante medios telemáticos.
