El secretario general del PPdeG, Alfonso Rueda, denunció hoy que el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, ha enviado una carta a ocho alcaldes de su partido en la que asegura que el convenio firmado para la gestión de servicios sociales en sus ayuntamientos queda sin efecto.
La semana pasada Vicepresidencia y catorce alcaldes (de varios partidos) firmaron un convenio para la gestión de catorce escuelas de día a cargo del Consorcio Gallego de Servicios de Igualdad y Bienestar.
Sin embargo, dos días después, Rueda y ocho alcaldes del PP que firmaron el acuerdo denunciaron en conferencia de prensa el chantaje al que a su juicio les sometía Vicepresidencia para la prestación y gestión de servicios sociales.
Según denunciaron tanto Rueda como los alcaldes de O Pino, Antas de Ulla, Lousame, O Rosal, Riós, As Neves y Muíños, además del de Ponte Caldelas, que acudió como vicepresidente de la Fegamp, Quintana empleó formas predemocráticas con el consentimiento del jefe del Ejecutivo, Emilio Pérez Touriño, para asfixiar económicamente a los municipios que no quieren que el Consorcio gestione los servicios sociales.
En conferencia de prensa la semana pasada, el alcalde de O Pino, Manuel Taboada, lo único que hizo el vicepresidente fue cambiar de nombre unos servicios que ya existían, pero no puso nada en marcha, mientras que el alcalde de Antas de Ulla, Javier Varela, calificó las prácticas de Vicepresidencia como mafia sicialiana, ya que realizan una oferta que no puedes rechazar, dijo.
Rueda calificó hoy en conferencia de prensa de calentón la carta enviada por Quintana, de quien dijo que no puede considerar que es el dueño de la bolsa del dinero, en alusión a su intención de dejar sin efecto el convenio con los alcaldes, ya que, a su juicio, el derecho administrativo y el ordenamiento jurídico no han muerto, por lo que el convenio debe seguir en vigor.
En la carta enviada por Quintana al alcalde de O Pino, y que el PP distribuyó en la conferencia de prensa, el vicepresidente asegura que se siente decepcionado por las valoraciones realizadas por el regidor municipal, independientemente de las calificaciones insultantes, afirma.
El número dos de la Xunta indica que siente un profundo respeto por los alcaldes de Galicia y que su deber es buscar nuevas modelos de relación institucional que superen las dependencias y tutelas del pasado, aunque apunta que no lo hará en contra de la voluntad de los regidores.
En consecuencia, Quintana recuerda que dos no pelan si uno no quiere y dos no acuerdan si a uno le desagrada, por lo que el vicepresidente le indica al alcalde de O Pino que queda desvinculado del convenio firmado la pasada semana. Actitud a la que me sumo para que, en virtud de lo previsto en la legislación vigente, el convenio quede sin efecto, concluye.
En la misiva, el vicepresidente gallego insta al alcalde a continuar la relación institucional por medio de subvenciones anuales, aunque le asegura que no puede garantizar cuál será el importe.
Sin embargo, Quintana garantiza que dará instrucciones para que el ayuntamiento reciba la misma cantidad que en 2005, cuando la coalición formada por BNG y PSdeG llegó a la Xunta, más las actualizaciones de incremento de precios desde entonces.
Con este modelo, señala el número dos de la Xunta, espera complacer los deseos del alcalde para evitar la asfixia económica.
Rueda aseguró que los alcaldes no van a renunciar al dinero que le pertenece a sus vecinos y explicó que los regidores pedirán amparo a la Fegamp.
Además, el dirigente del PPdeG afirmó que le gustaría saber la opinión del presidente de la Xunta sobre este tema, si lo consiente, si lo bendice o si mira para otro lado.
Sin embargo, dos días después, Rueda y ocho alcaldes del PP que firmaron el acuerdo denunciaron en conferencia de prensa el chantaje al que a su juicio les sometía Vicepresidencia para la prestación y gestión de servicios sociales.
Según denunciaron tanto Rueda como los alcaldes de O Pino, Antas de Ulla, Lousame, O Rosal, Riós, As Neves y Muíños, además del de Ponte Caldelas, que acudió como vicepresidente de la Fegamp, Quintana empleó formas predemocráticas con el consentimiento del jefe del Ejecutivo, Emilio Pérez Touriño, para asfixiar económicamente a los municipios que no quieren que el Consorcio gestione los servicios sociales.
En conferencia de prensa la semana pasada, el alcalde de O Pino, Manuel Taboada, lo único que hizo el vicepresidente fue cambiar de nombre unos servicios que ya existían, pero no puso nada en marcha, mientras que el alcalde de Antas de Ulla, Javier Varela, calificó las prácticas de Vicepresidencia como mafia sicialiana, ya que realizan una oferta que no puedes rechazar, dijo.
Rueda calificó hoy en conferencia de prensa de calentón la carta enviada por Quintana, de quien dijo que no puede considerar que es el dueño de la bolsa del dinero, en alusión a su intención de dejar sin efecto el convenio con los alcaldes, ya que, a su juicio, el derecho administrativo y el ordenamiento jurídico no han muerto, por lo que el convenio debe seguir en vigor.
En la carta enviada por Quintana al alcalde de O Pino, y que el PP distribuyó en la conferencia de prensa, el vicepresidente asegura que se siente decepcionado por las valoraciones realizadas por el regidor municipal, independientemente de las calificaciones insultantes, afirma.
El número dos de la Xunta indica que siente un profundo respeto por los alcaldes de Galicia y que su deber es buscar nuevas modelos de relación institucional que superen las dependencias y tutelas del pasado, aunque apunta que no lo hará en contra de la voluntad de los regidores.
En consecuencia, Quintana recuerda que dos no pelan si uno no quiere y dos no acuerdan si a uno le desagrada, por lo que el vicepresidente le indica al alcalde de O Pino que queda desvinculado del convenio firmado la pasada semana. Actitud a la que me sumo para que, en virtud de lo previsto en la legislación vigente, el convenio quede sin efecto, concluye.
En la misiva, el vicepresidente gallego insta al alcalde a continuar la relación institucional por medio de subvenciones anuales, aunque le asegura que no puede garantizar cuál será el importe.
Sin embargo, Quintana garantiza que dará instrucciones para que el ayuntamiento reciba la misma cantidad que en 2005, cuando la coalición formada por BNG y PSdeG llegó a la Xunta, más las actualizaciones de incremento de precios desde entonces.
Con este modelo, señala el número dos de la Xunta, espera complacer los deseos del alcalde para evitar la asfixia económica.
Rueda aseguró que los alcaldes no van a renunciar al dinero que le pertenece a sus vecinos y explicó que los regidores pedirán amparo a la Fegamp.
Además, el dirigente del PPdeG afirmó que le gustaría saber la opinión del presidente de la Xunta sobre este tema, si lo consiente, si lo bendice o si mira para otro lado.
