Cayetano Rivera es reservado y odia la atención de los medios que le ha acompañado toda su vida. Pero ahora, y como excepción, se ha sincerado para la edición española de Vanity Fair, donde ha hablado sobre la relación con su familia, los temores que le acompañan y sus proyectos profesionales.
El hijo menor de Paquirri y Carmina Ordóñez no estaba destinado a ser torero. Tras pasar su adolescencia en un internado suizo y estudiar producción de cine en Los Ángeles, la carrera profesional de Cayetano Rivera parecía más acorde con sus desfiles para la firma Armani que con la lidia.
Pero a los 28 años, la sangre de los Rivera, los Ordóñez y los Dominguín le hizo plantearse continuar con la tradición y ser torero. Esta entrada tardía en el mundillo le valió un par de cornadas graves por falta de técnica, pero Cayetano estaba decidido a continuar.
'Lo llevamos a torear vaquillas muy toreadas, fue sometido a madrugones, a frío, a calor extremo, pero resultó inútil. Cuando más sufría, más crecía su determinación', ha declarado Curro Vázquez, su tío y apoderado. El propio Cayetano reconoce que no fue fácil 'estuve año y medio sin contárselo a nadie. Era consciente de la repercusión que iba a tener', admite.
Pero parece que fue la decisión acertada, y sus triunfos en los ruedos no cesan desde entonces. Eso sí, Cayetano no es un torero al uso, y eso le ocasiona algunos problemas. En la plaza más de una vez le han dirigido gritos del tipo 'a torear a la pasarela', propios del machismo del mundo taurino.
Aunque reconoce que esos insultos le molestan, nada lo enfurece tanto como la presencia constante de la prensa rosa en su vida. Desde pequeño ha vivido rodeado de cámaras y portadas de revistas, pero no está dispuesto a continuar así. 'No me gusta estar siendo observado y juzgado por lo que hago o dejo de hacer. La fama me condiciona, desgraciadamente'.
Y son precisamente esas revistas las que no paran de buscar los problemas en la relación de Cayetano con sus hermanos Kiko y Julián Contreras. 'A veces se empeñan en hacer ver que no nos llevamos bien, pero nuestra relación es muy buena, aunque no hayamos convivido'.
En cuanto a las mujeres, Cayetano es pasional e incluso, a veces, obsesivo. Su amigo de la infancia Juan Bagration afirma que 'no coquetea nada, y cuando se enamora lo hace locamente'. El fin de su matrimonio con Blanca Romero coincidió con su entrada en el mundillo taurino, convirtiéndose así en un punto y aparte profesional y sentimental.
Ahora, parece que Cayetano ha iniciado una nueva vida al lado de la modelo Eva González, y los rumores apuntan a una boda próximamente. Claro que el torero lo niega, asegurando que se ríe de las fuentes, aunque reconoce que esas mentiras no le hacen daño.
Pero a los 28 años, la sangre de los Rivera, los Ordóñez y los Dominguín le hizo plantearse continuar con la tradición y ser torero. Esta entrada tardía en el mundillo le valió un par de cornadas graves por falta de técnica, pero Cayetano estaba decidido a continuar.
'Lo llevamos a torear vaquillas muy toreadas, fue sometido a madrugones, a frío, a calor extremo, pero resultó inútil. Cuando más sufría, más crecía su determinación', ha declarado Curro Vázquez, su tío y apoderado. El propio Cayetano reconoce que no fue fácil 'estuve año y medio sin contárselo a nadie. Era consciente de la repercusión que iba a tener', admite.
Pero parece que fue la decisión acertada, y sus triunfos en los ruedos no cesan desde entonces. Eso sí, Cayetano no es un torero al uso, y eso le ocasiona algunos problemas. En la plaza más de una vez le han dirigido gritos del tipo 'a torear a la pasarela', propios del machismo del mundo taurino.
Aunque reconoce que esos insultos le molestan, nada lo enfurece tanto como la presencia constante de la prensa rosa en su vida. Desde pequeño ha vivido rodeado de cámaras y portadas de revistas, pero no está dispuesto a continuar así. 'No me gusta estar siendo observado y juzgado por lo que hago o dejo de hacer. La fama me condiciona, desgraciadamente'.
Y son precisamente esas revistas las que no paran de buscar los problemas en la relación de Cayetano con sus hermanos Kiko y Julián Contreras. 'A veces se empeñan en hacer ver que no nos llevamos bien, pero nuestra relación es muy buena, aunque no hayamos convivido'.
En cuanto a las mujeres, Cayetano es pasional e incluso, a veces, obsesivo. Su amigo de la infancia Juan Bagration afirma que 'no coquetea nada, y cuando se enamora lo hace locamente'. El fin de su matrimonio con Blanca Romero coincidió con su entrada en el mundillo taurino, convirtiéndose así en un punto y aparte profesional y sentimental.
Ahora, parece que Cayetano ha iniciado una nueva vida al lado de la modelo Eva González, y los rumores apuntan a una boda próximamente. Claro que el torero lo niega, asegurando que se ríe de las fuentes, aunque reconoce que esas mentiras no le hacen daño.
