La del COB, una cantera fuerte y estable

Hablar del Club Ourense Baloncesto es hacerlo de historia del deporte de la canasta en la ciudad y provincia. El emblema y referente del balón naranja en Ourense y uno de los iconos deportivos a nivel autonómico por historia, resultados y afición tiene en su cantera al vivero en el que formar a los referentes individuales del futuro. El ambicioso proyecto del COB con sus 15 equipos de cantera va más allá de los resultados deportivos. A través de las escuelas, donde los más pequeños comienzan a dar sus primeros pases y anotar sus primeras canastas, el conjunto ourensano intenta aportar valores de convivencia y deportividad, antes de que empiecen a pensar en victorias o derrotas y es que una clasificación no siempre refleja el trabajo realizado. Posteriormente, a través de la cantera del COB y el Bball, se ha formado un interesante grupo de trabajo con entrenadores experimentados que cubren toda la pirámide formativa, desde los más pequeños de la categoría benjamín hasta los sénior, que aspiran a crecer desde la Tercera División para llegar cuanto antes a una competición que haga justicia a la historia del club. Además, con más de 300 jugadores entre todas las escuelas y los 15 equipos, la continuidad está garantizada, pasando ahora a buscar talento a nivel provincial para captarlo y que se sume al interesante proyecto del club azul y amarillo. Por eso, el próximo paso del club ourensano con su base es no solo mantener el número de jugadores, sino buscar a otros con potencial para convertirse en los nuevos Sony Vázquez, Carlos Rodríguez o Rodri Seoane. Equipos femeninos del COB Como parte de esa captación de talento y ampliación de miras para convertirse en un referente también a nivel autonómico, desde la coordinación deportiva de la base del COB se ha decidido ampliar el rango de acción y crear equipos de categoría femenina a imagen de otras canteras nacionales (cuentan con equipos júnior e infantil, además de los mixtos y las jugadoras de las escuelas), con el firme propósito de ser cada vez más completos estructuralmente y cubrir las necesidades de todas y todos los jugadores de la provincia de Ourense y, por qué no, de las limítrofes. Ahora, con el principio del trabajo ya hecho, que no era otro que conseguir cubrir todas las categorías formativas de las competiciones de la Federación Galega de Baloncesto, llega el momento de que el COB consolide un proyecto con mucho por hacer, pero que da pasos firmes y seguros para reverdecer los laureles de una entidad, una familia, que quiere ser importante juegue la liga en la que juegue, a través de una cantera fuerte y estable.