Mil comensales participaron en un cocido popular y hoy se repartirá 'bica blanca' gratis entre todos los asistentes en la Plaza da Picota.
Monterrei
'Festa da Cachucha' en Laza
El Entroido repone fuerzas en Laza para afrontar los días de diversión que se avecinan. Un millar de personas dieron buena cuenta en la noche del viernes de las cualidades de la "cachucha", que fue servida a modo de cocido que incluyó chorizos e incluso lacón. También hubo empanada y todo ello rociado con vinos de la comarca.
La cena fue en el pabellón de deportes, donde también se dio cuenta de las cualidades del licor café que se elabora en el municipio. Y tras la suculenta cena, hoy está prevista una nueva cita gastronómica, el reparto de bica blanca -uno de los dulces típicos del municipio- totalmente gratis en la Plaza da Picota, el principal escenario de la fiesta.
El alcalde, Xosé Ramón Barreal, recuerda que el Entroido de Laza conserva todos los elementos más ancestrales "nos que sempre estuvo presente a gastronomía. A Festa da Cachucha xa todo un clásico do Entroido. Ven xente de toda a comarca", apuntó.
La bica que está previsto repartir hoy tiene más de un metro cuadrado y será arrastrada en un carro de bueyes hasta el centro del pueblo. Barreal Novo recuerda que el dulce se hará pequeño dada la afluencia de público e "xa temos preparadas máis bicas", dijo.
Os Peliqueiros se “estrenan” hoy poniendo orden
El Entroido ya corría en la tarde de ayer por las calles de Laza. Sobre las tres de la tarde, se podían ver todo tipo de disfraces e incluso plataformas adornadas con todo tipo de elementos para participar en el desfile previsto para la tarde de hoy domingo. Pero lo que no se veían eran peliqueiros, el traje típico de la fiesta en el municipio. Hoy habrá cientos, pero la mayoría de ellos aprovecharon la jornada de ayer para planchar el traje y dar brillo a los zapatos, chocas, cinturones y el látigo, con el que ponen orden entre la multitud durante estos tres días que dura la fiesta. "O peliqueiro ten que sair a calle impecable, sin un mancha nin unha arruga", apuntó el alcalde y peliqueiro, Xosé Ramón Barreal.
En Laza, hoy es la estrena de los peliqueiros, que deben salir relucientes de sus domicilios para, como manda la tradición, reunirse en la Plaza da Picota y, de ahí, encaminarse a la iglesia parroquial donde deben saludar con su látigo a los vecinos a la salida de la misa dominical. El acto es todo un ritual, en el que los vecinos agradecen el saludo por festejar el Entroido un año más.
Después a reponer fuerzas y 12 voluntarios municipales se encargarán de cortar y repartir la bica, que da rienda suelta a tres días de fiesta. En los domicilios de Laza también se "mimaban" ayer las hormigas recogidas en el monte para soltarlas el próximo lunes.
