La Corte de Oslo decidió ayer prolongar doce semanas más la prisión preventiva del ultraderechista Anders Behring Breivik, autor confeso del doble atentado del pasado 22 de julio en Noruega en el que murieron 77 personas. La jueza justificó su decisión en que Breivik reconoció los hechos, en su gravedad y en el peligro de que se repitan si es liberado.
En la vista celebrada antes, Breivik, había pedido su puesta en libertad 'inmediata' al considerarse inocente y había reclamado que se le condecore como un héroe por lo que considera actos patrióticos. Dijo que 'los ataques en el complejo gubernamental iban dirigidos contra traidores que cometen destrucción cultural, la deconstrucción del grupo étnico noruego, es lo mismo que limpieza étnica noruega', dijo Breivik, lo que provocó estupor en la sala, donde estaban presentes supervivientes de los atentados.
