El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó hoy el ataque con morteros en el que murieron al menos a 21 personas ayer durante un acto electoral en el sur de Siria.
Ban reiteró en una declaración su rechazo al uso indiscriminado de armas contra los civiles por parte de cualquier bando, ya que dijo que se trata de una violación del derecho humanitario internacional.
Además, el secretario general "lamenta profundamente la incapacidad de la comunicad internacional para unirse en detener este conflicto y en encontrar la forma de hacer que los autores de atrocidades como esta rindan cuentas", añade la declaración.
Al menos 21 personas murieron y otras 30 resultaron heridas en el ataque llevado a cabo por un grupo rebelde radical islámico en un acto electoral de apoyo al presidente de Siria, Bachar al Asad, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Los radicales lanzaron un proyectil de mortero contra un grupo de personas que hacía campaña a favor de Al Asad en el barrio de Al Matar, en la ciudad meridional de Deraa, indicó ese grupo en un comunicado.
