Al menos dos personas murieron ayer en enfrentamientos entre partidarios y detractores del presidente egipcio, Mohamed Mursi, en las ciudades de Beni Suef y Asiut, ambas al sur de El Cairo, según informaron fuentes policiales.
Según el jefe de las fuerzas de seguridad en Asiut, Abul Qasem Abudeif, una persona murió y otras siete resultaron heridas graves en los choques entre islamistas y opositores frente a la sede del gubernamental Partido Libertad y Justicia (PLJ) en esa ciudad. Esta nueva muerte se añadía a la de un joven de 22 años, que murió en el hospital por las heridas sufridas en un ataque perpetrado por desconocidos contra manifestantes antigubernamentales en Beni Suef.
Cientos de miles de manifestantes salieron a las calles de las principales ciudades de Egipto para exigir la dimisión del presidente del país, Mohamed Mursi. Pese a las protestas, Mursi rehusa abandonar su cargo y achaca la violencia a simpatizantes del derrocado presidente Mubarak.
El Frente 30 de Junio anunció que las protestas estarán seguidas de concentraciones indefinidas en la plaza Tahrir, ante el Palacio Presidencial de Heliópolis y en las principales plazas de todas y cada una de las ciudades de Egipto y que se mantendrán hasta que Mursi dimita.
En El Cairo fueron varias las columnas que convergieron en distintos barrios de la ciudad para dirigirse a la emblemática plaza Tahrir, epicentro de las protestas que propiciaron en 2011 el derrocamiento del presidente Hosni Mubarak. Las distintas columnas estaban encabezadas por personalidades del Frente de Salvación Nacional, principal coalición opositora, como los excandidatos presidenciales Hamdeen Sabbahi o Mohamed ElBaradei.
Mientras, el presidente Mursi vivió la jornada de protestas contra su gestión atrinchreado en una de sus residencias oficiales fuera de El Cairo, siguiendo con atención los acontecimientos de la jornada. Al parecer tuvo disponible todo el día un avión ya preparado para evacuarlo si fuera necesario.
Cientos de miles de manifestantes salieron a las calles de las principales ciudades de Egipto para exigir la dimisión del presidente del país, Mohamed Mursi. Pese a las protestas, Mursi rehusa abandonar su cargo y achaca la violencia a simpatizantes del derrocado presidente Mubarak.
El Frente 30 de Junio anunció que las protestas estarán seguidas de concentraciones indefinidas en la plaza Tahrir, ante el Palacio Presidencial de Heliópolis y en las principales plazas de todas y cada una de las ciudades de Egipto y que se mantendrán hasta que Mursi dimita.
En El Cairo fueron varias las columnas que convergieron en distintos barrios de la ciudad para dirigirse a la emblemática plaza Tahrir, epicentro de las protestas que propiciaron en 2011 el derrocamiento del presidente Hosni Mubarak. Las distintas columnas estaban encabezadas por personalidades del Frente de Salvación Nacional, principal coalición opositora, como los excandidatos presidenciales Hamdeen Sabbahi o Mohamed ElBaradei.
Mientras, el presidente Mursi vivió la jornada de protestas contra su gestión atrinchreado en una de sus residencias oficiales fuera de El Cairo, siguiendo con atención los acontecimientos de la jornada. Al parecer tuvo disponible todo el día un avión ya preparado para evacuarlo si fuera necesario.
