El decreto ley, aprobado hace dos días por la Junta Militar, para impedir la participación en los próximos comicios legislativos de miembros del extinto régimen de Hosni Mubarak no podrá ser aplicado a tiempo, reveló hoy a Efe el portavoz de la Comisión Suprema Electoral Judicial, Alí Hasan.
'No hay tiempo para aplicarlo, lo vamos a estudiar tras las elecciones', dijo Hasan.
Hace dos días, la Junta Militar egipcia publicó el decreto ley que prohíbe presentarse a las elecciones a cualquier persona que 'corrompa la vida política y dañe el interés del país', en un intento de calmar los ánimos de los manifestantes en la plaza Tahrir de El Cairo.
Hasan explicó que primero tienen que investigar cuánta gente ha sido denunciada y luego mandar los casos a un tribunal legislativo, algo para lo que, a su juicio, no hay tiempo antes de que comiencen los comicios parlamentarios el próximo día 28.
Muchos miembros del disuelto Partido Nacional Democrático (PND) de Mubarak han formado después de la revolución egipcia nuevos partidos, mientras que otros se han integrado en diversas formaciones.
Desde hace meses los activistas y miembros de partidos políticos denuncian que los remanentes del antiguo régimen intentan volver al Parlamento, y desde el inicio de la campaña electoral han surgido diversas iniciativas para identificar a los llamados 'fulul' (remanentes).
El decreto ley modifica la conocida como Ley de Traición de 1952 para pedir responsabilidades a los dirigentes implicados en casos de corrupción y sustituye el término 'traición' por la frase 'Corromper la vida política'.
Hace más de una semana, el Tribunal Supremo Administrativo de El Cairo emitió una sentencia que permitía a los miembros del disuelto PND participar en las próximas elecciones legislativas.
El PND fue creado en 1978 por el entonces presidente, Anuar al Sadat, su estructura se confundió con la del Estado y, entre acusaciones de fraude, arrasó en todas las elecciones parlamentarias celebradas desde su creación, la última en noviembre-diciembre de 2010, en la que se hizo con más de un 80 por ciento de los escaños.
Tras la Revolución del 25 de Enero, el PND fue disuelto y se abrieron procesos judiciales que han llevado a la cárcel a sus principales responsables, desde Mubarak hasta el hijo de este Gamal, 'número tres' de la formación, pasando por su secretario general Shafuat al Sherif o el secretario de organización Ahmed Ezz.
